Cultura

El desencuentro entre Goethe y Beethoven

Los artistas tuvieron un altercado en 1812, durante un paseo

Representación. Esta pintura de Carl Rohling retrata cómo Beethoven desaira a la comitiva de nobles y reprueba los buenos modales de Goethe.

Representación. Esta pintura de Carl Rohling retrata cómo Beethoven desaira a la comitiva de nobles y reprueba los buenos modales de Goethe.

SAÚL RODRÍGUEZ

En su libro, Pensemos en Beethoven (2015), el escritor mexicano Eusebio Ruvalcaba redactó y analizó algunas de las anécdotas que el creador de la Novena Sinfonía tuvo con uno de sus mayores ídolos: el poeta Johann Wolfang Goethe.

Reconocido como uno de los escritores más importantes en la historia de Alemania, Goethe es el máximo rostro del romanticismo germano. Por su parte, Beethoven es considerado como la cúspide del pensamiento musical en Occidente.

El compositor solía enviar cartas al creador de Fausto, con sus poemas musicalizados. En una de ellas escribió: "Es muy fácil ponerle música a sus poemas porque en sí mismos contienen la música celestial del alma". Sin embargo, el arte sonoro de Beethoven nunca fue del agrado de Goethe y desdeñaba sus propuestas.

ENCUENTRO

Otra de las anécdotas que cuenta Ruvalcaba, narra que un día Beethoven entró en el balneario de Baden-Baden, un municipio ubicado en la llamada Selva Negra, al sureste de Alemania, (otras fuentes afirman que fue en Teplitz), como parte de un tratamiento que le su médico le había recetado para su sordera. Allí encontró a Goethe y la solitaria figura del poeta en la administración compuso en el músico un gesto espontáneo.

Motivado por su admiración, Ludwig lo invitó a su casa y le prometió que tocaría para él. Se dice que en la visita, Beethoven se sentó frente al piano y entregó su alma en el martilleo de las teclas. Al terminar, preguntó a Goethe qué opinaba de lo que acababa de escuchar. El poeta contestó con porte serio: "Su música es… encantadora".

El ego de Beethoven no soportó la frialdad del escritor, por lo que estalló como un fortísimo mal sonorizado. El compositor le reclamó que si aquello era todo lo que podía decir de su arte, que había soñado durante 40 años en tocar para Goethe y no comprendía que sólo aquellas palabras eran las elegidas para salir de la boca de Goethe. "Señor, la música debe hacer saltar el fuego del espíritu".

EL FAMOSO RECORRIDO

Un día después, el dúo de genios realizó un paseo por el balneario. En los corredores se vieron de frente ante los visitantes del lugar, que se reverenciaban el paso de los artistas.

Se cuenta que Goethe le comentó al músico: "Me fastidia tanta gente que me saluda". La respuesta de su compañero fue tajante: "No se preocupe, mi excelencia, que tal vez no lo saluden a usted, sino a mí".

Los artistas solían andar por los pasillos que también eran recorridos por la nobleza de Alemania. Beethoven divisó al contigente de aristócratas y le aconsejó al escritor que no se despegara de él, que la realeza tenía que abrirles paso y reverenciarlos, no al contrario.

Pero Goethe, fiel a sus modales, se separó del músico para dar paso a la comitiva. Se apartó hacia un lado, se quitó el sombrero y reverenció a los nobles. Beethoven hirvió en cólera, y con las manos en la espalda arremetió contra el grupo que terminó cediendo ante el genio de Bonn.

Inmediatamente, Ludwig reclamó a Goethe: "Usted no debe mostrarse así. Usted hace mal. Sería mejor que les dijera francamente lo que piensa. De otra manera, ellos no aprenderán nada".

Aquel altercado molestó a Goethe, quien aborrecía la brusquedad del músico, así como su notable carencia de diplomacia. Aunado a esto, Beethoven comenzó a cortejar a Bettina Bretano, una escritora romántica. Goethe sucumbió en celos, pues también estaba enamorado de ella, aunque le llevara 40 años de edad (Beethoven la superaba por 20).

Eusebio Ruvalcaba también se pregunta la razón por la cual Goethe no pudo comprender a Beethoven, si el escritor también amaba la música, pues había hecho de ésta y de la mujer sus "seres aliados". Los testimonios que se conservan remiten a que el nombre del genio de Bonn frente a él. Sólo un joven compositor se atrevió a tocar una pieza de Beethoven ante el poeta: Felix Mendelssohn recibió la desaprobación del escritor.

"La soberbia, entre otras cosas, le impidió a Goethe valorar a Beethoven en todas sus dimensiones. Ni aun después de muerto Beethoven, Goethe hablaba de él; ni permitía que nadie lo hiciera, cuando menos en su casa", escribe Ruvalcaba.

Johann Wolfang Goethe falleció un día como hoy, 22 de marzo, pero de 1832. Su tinta dejó de fluir por los pergaminos, pero su obra, como todo aquel fruto de un gran pensamiento, perduró por siglos.

En 2020, Beethoven estaría cumpliendo 250 años de vida, por lo que alrededor del mundo se han realizado conciertos en homenaje.

Paseo. Retrato de los artistas hecho por Adolf Karpellus.
Paseo. Retrato de los artistas hecho por Adolf Karpellus.
Rompimiento. Beethoven y Goethe en un grabado de Emilie Pierre Richard.
Rompimiento. Beethoven y Goethe en un grabado de Emilie Pierre Richard.

Leer más de Cultura

Escrito en: Johann Wolfang Goethe Beethoven

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Cultura

TE PUEDE INTERESAR

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Representación. Esta pintura de Carl Rohling retrata cómo Beethoven desaira a la comitiva de nobles y reprueba los buenos modales de Goethe.

Clasificados

ID: 1685941

YouTube Facebook Twitter Instagram TikTok

elsiglo.mx