La regidora plurinominal declaró luego del escándalo de manera textual “No tengo idea de qué habla (Catalina)”. (EL SIGLO COAHUILA)
La regidora presidenta del cabildo de Frontera, Obdulia Cisneros, fue acusada de quedarse con el dinero recabado para el tratamiento médico de un niño con cáncer, y por apropiarse de 70 mil pesos que pidió a dos ciudadanas para un programa de financiamiento a fondo perdido.
En medio de gritos entre el pasillo del Palacio de Gobierno Municipal y la oficina de la edil, una mujer exigió a la funcionaria de elección popular que le regresara su dinero, y que diera la cara a los medios de comunicación que se congregaron en el lugar por el escándalo que ocurría.