Esta semana, la Alianza Mexicana contra el Fracking (AMCF) denunció que sin análisis ni debate el senador de Morena, Armando Guadiana Tijerina, busca avalar el fracking en México.
Acusó que antes de ser discutidas, Guadiana Tijerina, presidente de la Comisión de Energía del Senado, adelanta que no serán aprobadas iniciativas de prohibición del fracking, cuando corresponde al senador abrir un debate incluyente del tema, no ser promotor de esa tecnología.
En días recientes, Guadiana, senador por Coahuila, declaró que el fracking debe continuar en México, ante lo cual la AMCF manifestó su rechazo.
El senador afirmó que "ahora se hace el fracking con más orden, con mayor cuidado ecológico y con menos agua"; pero no ofrece ejemplos, responde la AMCF.
El experto e ingeniero de campo Roberto Ochandio explica que ni en Estados Unidos, Canadá o Argentina existe un solo ejemplo que avale este tipo de comentarios. No existen métodos de fracking menos dañino. Lo que se hace ahora es llamado "súper fracking", que consiste en aumentar la longitud de los pozos horizontales, aumentar la densidad o proximidad de los mismos, y aumentar los volúmenes de agua, arena y productos químicos. "Exactamente lo contrario a lo expresado por el senador".
Guadiana insiste en que debe reactivarse la exploración y perforación de la parte norte de Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas. Lo que no dice -ataja la AMCF- es que dado que los yacimientos del Norte mexicano están en la misma cuenca hidrocarburífera que Eagle Ford, comparten las mismas características tanto en formación geológica como en métodos extractivos, y significa que los problemas del noreste mexicano serán muy parecidos a los de Eagle Ford en Texas como explica Ochandio.
Estos problemas fueron alertados el 3 de octubre de 2018 en la audiencia ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos realizada en Boulder, Colorado, EU, audiencia concedida a solicitud de 126 organizaciones encabezadas por la Alianza Latinoamericana frente al Fracking, en la que se advirtió que en el yacimiento Eagle Ford de Texas el consumo de agua aumentó 770% en los últimos 5 años, usando ahora 42 mil 500 metros cúbicos por pozo como promedio. Al mismo tiempo, los fluídos de retorno aumentaron 1440%, llegando a 20 mil 700 metros cúbicos en pozos gasíferos de esa zona.
Es irresponsable -enfatizó la AMCF- que el senador que preside la Comisión de Energía pase por alto toda la documentación académica, científica y social existente respecto a los severos e irreversibles impactos ambientales y sociales asociados al fracking, una parte de ellas citada en las exposiciones de motivos de las iniciativas presentadas en la actual Legislatura entre septiembre de 2018 y julio de 2019 tanto en Cámara de Diputados como de Senadores, proponiendo la prohibición de la fractura hidráulica mediante la creación de leyes específicas o modificaciones a las existentes e incluso a la Constitución.
Guadiana ignora deliberadamente las numerosas prohibiciones y moratorias que han establecido países como Francia, Bulgaria, Irlanda y Escocia, y los gobiernos de Quebec, Nueva York, Maryland y Vermont.
Con relación a declaraciones del senador respecto a que la prohibición del fracking podría no ser aprobada en comisiones, la AMCF respondió: Resulta preocupante que se anticipe un rechazo por parte de quien preside la Comisión de Energía de la cámara alta sin que haya tenido lugar un análisis y una discusión parlamentaria seria, objetiva y abierta a la sociedad.
En lugar de esto -añadió-, Guadiana declara que en noviembre presentará, con apoyo de organizaciones empresariales, una iniciativa de ley para aprovechamiento de recursos de hidrocarburos no convencionales que requieren fracking para su extracción.
El senador hizo este anuncio el 3 de octubre en Coahuila cuando se celebraron Mesas Técnicas organizadas por la Comisión de Energía del Consejo Coordinador Empresarial y las comisiones de Energía del Senado y Diputados.
Frente a este "panorama enrarecido por las declaraciones del senador Guadiana", la AMCF urgió al presidente López Obrador, a que su compromiso 75 de los 100 del gobierno de la 4T, sobre que no habrá más fracking en México, se traduzca en acción contundente con un decreto de suspensión inmediata a la realización de fractura hidráulica.
Y urgió al Poder Legislativo a dictaminar las iniciativas presentadas, a fin de lograr una prohibición explícita del fracking en México.
