Desaparecer el Fondo de Protección contra Gastos Catastróficos, pieza clave del Seguro Popular, pondría en riesgo la atención de pacientes sin seguridad social con enfermedades de alto costo y aumentaría el gasto de bolsillo de las familias, advirtieron especialistas.
Actualmente, el fondo proporciona recursos, a través de un fideicomiso, a hospitales acreditados de los 32 estados para atender a población abierta con alguno de los 66 padecimientos que cubre, como cáncer de mama, infantil, VIH, hepatitis y trasplantes.
Salomón Chertorivski, exsecretario de Salud, explicó que el 8 por ciento de todos los recursos del Seguro Popular se destina a ese fondo, por persona afiliada, por lo que mientras más se inscriban, más crece la bolsa y se pueden cubrir otros males.
Subrayó que el Gobierno no debe utilizar ese dinero para regularizar plazas médicas o terminar hospitales inconclusos, porque pertenece a quienes aportaron cuotas al programa.