Fe. Ayer se ofreció una reliquia en el Hospital Infantil en donde se entregaron bolos y pastel a los presentes. (GUADALUPE MIRANDA)
La explanada del Hospital Infantil se volvió una fiesta. Padres de familia y personal ofrecieron una reliquia tipo piñata, en honor al Santo Niño de Praga y al Divino Niño, por los favores recibidos por su intercesión.
La cita fue ayer al mediodía. Padres de familia y pequeños se reunieron para celebrar.
Como Patricia y Rosely, cuyos hijos vivieron días difíciles a causa de complicados padecimientos de salud que en algún momento pusieron en riesgo su vida.
Como fue el caso del pequeño José Manuel, quien nació a los 30 semanas de gestación.
Debido a que fue prematuro, se presentaron una serie de complicaciones en su salud, como una enterocolitis necrosante, que por lo menos en dos ocasiones, hizo pensar a los médicos que no sobreviviría.
"Desde el primer día, yo me hinqué y le dije, es tuyo tu sabes lo que haces con él, yo solamente te pido que si te lo vas a llevar que sea rápido, pero si va a vivir que tenga la fortaleza para todas las pruebas que le pongas", y así fue, dijo su madre.
Fueron 38 días los que el pequeño, ahora de 1 año 7 meses, luchó por su vida.
Y fue precisamente Patricia, la encarga de restaurar la imagen.
La imagen del Santo Niño de Praga, fue donado por Beatriz Gómez hace más de 50 años, y fue elaborado en Checoslovaquia.
El pequeño Adrián, de 7 meses, también luchó por su vida.
Es hijo de Rosely, quien ahora se dice devota del Santo Niño.
El pequeño permaneció cinco días internado por una neumonía, después de haber pasado por el Seguro Social en donde lo dieron de alta en cuestión de horas.
Las madres de familia piden a esas mamás que se encuentran en una situación difícil, a no perder la fe, que crean, sino del Santo Niño, de Dios. "Tengan fe en Dios, todas las cosas que nos pasan y que les pasan a nuestros bebés, deben ser para testimonio de que Dios existe, suceda lo que suceda".
