Exfoliación.
Hoy en día, tenemos todo tipo de productos para vernos y sentirnos bellas , pero décadas atrás, las mujeres tenían que ser más creativas con el uso de los cosméticos e ingredientes caseros, incluso si se trataba de estrellas de Hollywood. Gracias a ese ingenio, las abuelas nos han dejado un legado de trucos simples y efectivos:
Dulce exfoliación. Seguramente, has escuchado que el azúcar es una maravilla para exfoliar. No se equivocaron, pues una cucharada de azúcar morena, mezclada con un poco de miel o con la crema humectante que habitualmente usas, puede hacer maravillas por el rostro al remover las células muertas de manera suave y natural.
Hidratación profunda. Después de exfoliar, es necesario hidratar y qué mejor manera de hacerlo que con una mascarilla de ingredientes que encontrarás en la cocina: aguacate y aceite de oliva. Ambos aportan humedad y brillo a la piel, gracias a su alto contenido en ácidos grasos esenciales y vitamina E. Aplícala por 10 minutos una vez por semana. Puede ser el complemento perfecto para tu rutina de cuidados, especialmente si eres de piel seca.
Belleza helada. Antes sí que aprovechaban los beneficios del agua fría al bañarse o al aplicar compresas, ya que con esto se activa la circulación y se consigue que la piel se vea más luminosa y firme. En el contorno de ojos, ayuda a bajar la hinchazón rápidamente.
Blush temporal. El rubor natural de antes consistía en dar pequeños pellizcos para activar los capilares, aunque su efecto fuera momentáneo.
Maquillaje de antaño. Las estrellas de Hollywood no tenían una paleta de contouring para definir sus rasgos, pero eso no les impedía sacarle provecho a sus rostros. Grace Kelly marcaba sus característicos pómulos usando dos tonos de rubor, uno claro y otro oscuro. Mientras que Marilyn Monroe añadía volumen a sus labios aplicando varios tonos de rojo, dejando el tono más oscuro en los bordes y el más claro y brillante en el centro para un look sensual.
