El mediocampista de Boca Juniors, Pablo Pérez, fue uno de los más afectados tras los hechos de violencia en su traslado al Monumental, casa de River Plate.
Luego de los incidentes suscitados ayer en el trayecto de Boca Juniors rumbo a la cancha del Estadio Monumental, la directiva xeneize solicitó en una petición formal que se suspenda la final de vuelta ante River Plate y analizarán que se les conceda el campeonato.
Según diversos medios y el comunicado oficial del club, Daniel Angelici, presidente de Boca Juniors, así como gran parte de la directiva que él encabeza, presentaron una inconformidad para que el duelo que se llevará a cabo esta tarde sea suspendido tras las agresiones sufridas ayer en su arribo a la cancha del Estadio Monumental.
"El Club Atlético Boca Juniors realizó este domingo una presentación formal ante la Conmebol para solicitar que la final de la Copa Libertadores se pueda disputar en condiciones de igualdad, tal como acordaron los presidentes de la entidad sudamericana, de Boca y de River, en el acta que firmaron el sábado en el Monumental", asegura en el comunicado el cuadro dirigido por Guillermo Barros Schelotto.
Aunque el club xeneize se comprometió a jugar el día de hoy el partido, luego que fuera aplazado unas horas ayer y después cancelado para disputarse hoy, todo parece indicar que Angelici sostendría una nueva reunión con Alejandro Domínguez, presidente de la Conmebol, así como con Rodolfo D'Onofrio, mandamás de River Plate.
En 2015, la Conmebol castigó a Boca Juniors eliminandolos de la competición tras la agresión de los aficionados a los jugadores de River Plate con gas pimienta, mismo que arrojaron desde las gradas del inmueble de La Bombonera.
