Nosotros eventos Columnas editorial

Ensayo sobre la cultura

El mexicano cósmico

Uno de los tantos libros que escribió Vasconcelos se llamaba El hombre cósmico. La tesis que sustentaba es que la cultura nacional contiene todas las culturas. En El espejo enterrado de Carlos Fuentes, retoma alguna de estas ideas. Para hacer conciencia de lo que esto significa, hay que desmenuzar la idea.

Lo primero que sabemos es que América es conquistada por los españoles, nunca se nos dice que Mesoamérica es conquistada por los aztecas, muy poco se nos menciona que los aztecas son herederos de tres culturas anteriores que fueron la Olmeca, la Tolteca y la Teotihuacana. Sabemos que la cultura española tiene influencia de la grecolatina, pero también tiene influencia visigótica, en realidad, es la continuación de ésta, además que es muy importante la relación con la cultura musulmana y la judía. El sur de España no se entiende sin el imperio andaluz y los omeyas.

Por la parte del Pacífico, recibimos la influencia de las culturas orientales, primero a través de la Nao de China y posteriormente con la emigración que se produce en los siglos XIX y XX.

En el plano religioso, nuestra principal influencia es la cristiana romana, pero ya lo he dicho que en España convivió con la musulmana y la judía, que son las tres grandes religiones monoteístas que tienen como referencia a Abraham, personaje de la Biblia. De la influencia grecolatina también existe el conocimiento de las religiones politeístas, cuyos personajes, en diversas épocas históricas, han sido rescatadas del olvido y puestas al día. En eso consistió el Renacimiento y el Neoclasicismo.

Esto es un gran crisol de culturas que de sólo mencionarlo, cansa. Lo que significa tratar de comprender lo que recibimos de cada una de ellas y cuáles la razón de que sean importantes. Nuestro sistema educativo y cultural le ha quitado el valor a producir la conciencia de lo que en realidad somos, porque muchos de los procesos históricos han sido difíciles de digerir y en lugar de hacerlo, se recurre al mito y a la mentira.

Para empezar: "los españoles nos conquistaron, hay que aborrecer a los gachupines". Hoy por hoy, en el árbol genealógico de los mexicanos que habitan en las ciudades, hay un español y basta referirnos al apellido. En la sangre indígena pura, posiblemente también exista un conquistador, no español, pero si mexica, teotihuacano, mixteco, zapoteco, olmeca, tolteca. Que eran imperios, las ruinas arqueológicas lo demuestran. Si conocen algo de la historia de los mayas, también sabemos que se dedicaban a la conquista y su expansión abarca desde Guatemala hasta Yucatán, donde se yerguen majestuosas sus últimas ciudades, como Uxmal y Chichen Itzá.

La verdad es que, en el mundo, un pueblo es conquistado o conquistador. Muchas veces, los pueblos que son conquistados se vuelven conquistadores y viceversa. Los que no llegan a conquistar, pronto son absorbidos por pueblos más fuertes que les imponen sus modelos de vida. Así crecieron los musulmanes, y algunos que los llegaron a dominar, con el tiempo se convierten a la religión del conquistado para poderle gobernar.

Si la historia del mundo se hace a base de conquistas, entonces, para qué subrayar que los españoles son malos por venirnos a conquistar. Si esto es así, los aztecas también son malos porque solamente 130 años antes ya habían conquistado Mesoamérica, derrotando al reino de Azcapotzalco, que anteriormente señoreaba esta región. Pero a los aztecas, nadie los juzga como malos por ser conquistadores. Los purépechas se sienten orgullosos de haberlos derrotado. Es el gran fracaso de Axayácatl.

Los griegos nunca llegaron a ser un gran imperio porque carecían de unidad. Las pequeñas ciudades estado eran enemigas una de otra y sólo se unificaron en las guerras médicas. Fue su única gloria. En las guerras del Peloponeso, se dedicaron a la autodestrucción. ¿Por qué son importantes en nuestra cultura? Porque esa fue su área de conquista. Lo que produjeron intelectualmente en dos o tres siglos y que jamás volvieron a lograr. El siglo de Pericles (V A.C.) es su gloria. El primer conquistado fue Alejandro Magno, que esparció la cultura helénica por todo su imperio. Posteriormente, los romanos, que hasta antes de conocerlos, a pesar de su poderío militar, eran más bien bárbaros. Los musulmanes rescataron muchos de sus libros en la Edad Media, y a partir de ahí, lo pudieron hacer los cristianos europeos. La literatura, el arte, la política, la ciencia, la filosofía, nace con los griegos, pueblo que fue conquistado por todos.

Somos lo que somos por ser producto de los procesos históricos, que nada tiene que ver con los héroes de cartón que nos fabrican, sobre todo en la historia nacional. Tener conciencia es saber cuáles fueron esos procesos y en qué forma nos siguen afectando hoy en día. El hombre tiene conciencia; el animal, no.

  Por: José Luis Herrera Arce

Leer más de Nosotros

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Nosotros

TE PUEDE INTERESAR

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 1480459

YouTube Facebook Twitter Instagram TikTok

elsiglo.mx