LA PROMOCIÓN DEL ABORTO ES CONTRA LA DEMOCRACIA
Para ser auténticas, las leyes deben estar fundadas en la razón, en la verdad; estar en consonancia con la justicia y proteger los derechos inherentes a todos los seres humanos. Pero la instauración de una nueva dictadura mundial, comienza con la política que propone la distinción entre derechos humanos y legislación positiva.
Uno de los principios básicos de la democracia moderna consiste en el reconocimiento de la diferencia esencial entre los derechos humanos y la legislación positiva e incluso la legislación constitucional. Logrando esto se sientan los principios de un Estado totalitario, que no reconoce la existencia de derechos humanos anteriores a la propia constitución del Estado, pudiendo de esta forma, modificarlos e imponerlos, según su propio arbitrio. La democracia sólo puede desarrollarse donde los derechos humanos sean reconocidos como tales por sí mismos, donde no sean una concesión del gobierno, donde no sean el resultado de un acuerdo entre los legisladores, donde no sean el fruto de una decisión del pueblo sacada de un plebiscito. Implantar el aborto representa el paso más decisivo para la transformación gradual de los derechos humanos en legislación positiva. El efecto de haberla incluido ya en la Ciudad de México, está motivando la creación sucesiva de otras leyes para justificar los errores de las anteriores. Si se logra esto estará prácticamente instalada la destrucción del ideal democrático y, debido al carácter internacional de la agenda que la impulsa, se inaugurará una forma enteramente nueva de dictadura global.
Iniciada con la creación del consejo Poblacional, en Nueva York por Rockefeller III para lograr la legislación del aborto (1952) y continuada con la Fundación Ford (1990) y su política mundial de los recechos sexuales y reproductivos, ahora busca producir en todos los países una falsa política de reducción de daños, de "aborto seguro" y de la contracepción de emergencia; es por ello que ahora se pretende instalar esta cultura de la muerte en México.
A pesar de que el pueblo mexicano es ampliamente contrario al aborto, el actual gobierno está modificando vergonzosamente la estructura pública para promover el aborto en el país a través de diversos medios, usando las instituciones públicas, entre ellas la Secretaría de Salud y la de Educación, imponiendo la ideología de genero y el aborto e incidiendo en la opinión pública, contrariando los principios básicos de respeto a los individuos a los cuales se debe y atacando los principios básicos de la legislación vigente a través de las normas oficiales.
Un ejemplo en ese sentido es la Norma Oficial Mexicana 046 de la Secretaría de Salud que desestiman la denuncia penal en caso de violación lo que permite el encubrimiento del agresor y no obliga al personal de salud a verificar la violación y deja fuera a los padres de niñas de entre 12 y 18 años de edad. Con esta norma se violenta la legislación de los estados en cuanto a capacidad jurídica y patria potestad; además sustituye eufemísticamente la palabra aborto por la de "Interrupción Voluntaria del Embarazo" dejando de ser por ello un delito para convertirse en un derecho de la víctima (e incluso del violador).
Habiendo visto la fuerza que las familias organizadas manifestaron en octubre de 2016 con las multitudinarias marchas realizadas en todo el país, se obstinan en ir contra la voluntad del pueblo realizando una serie de medidas que, bajo la falsa apariencia de una política de salud, enseñan a usar los método existentes para abortar, ofreciendo servicios de asesorías para mujeres que afrontan un embarazo indeseado y facilitando el acceso a medicinas abortivas para el público. Todas estas medidas son implementadas independientemente del hecho de que la ley establezca o no que la práctica del aborto sea un crimen.
Sin embargo en todo el continente varios grupos en defensa de la vida, han investigado el origen internacional de estas iniciativas para desencadenar una nueva estrategia, mucho más amplia y ambiciosa, para la promoción del aborto en todo el continente, ideada principalmente para los países que se resisten a la implantación del aborto, particularmente en América Latina. No siendo escondidas las instituciones que los promocionan y siendo evidentes los resultados que se han tenido, no es difícil descubrir que es parte de un plan pesadamente financiado por organizaciones internacionales que invierten en la promoción del aborto en todo el mundo, ejecutado a través del recurso de prácticas anti-democráticas, que solo pueden alcanzar éxito por el engaño y la ocultación de la verdad, con el silencio y la complicidad de los medios, pues en forma limpia y democrática inevitablemente pierde. La promoción del aborto exige negar los avances de la ciencia y negar la naturaleza de la mujer al engañarla; por tales motivos el proyecto posee una probabilidad de éxito prácticamente nula. México cuenta con grandes valores culturales y familiares que son parte de una resistencia mundial para revertir esta tendencia. El reciente resultado de las elecciones en Costa Rica es ya un inicio de ello.
Las verdades evidentes no pueden ser ocultadas eternamente y por tanto este plan está destinado a fracasar. Los aspirantes a la presidencia, a las cámaras y en general a todos los puestos de elección popular que estarán a disposición del electorado en los próximos comicios, harían bien en definirse de una vez, sin temor a la presión internacional y a las minorías, para saber de una vez quienes van a defender la vida, la familia en consonancia con los intereses nacionales. El descubrimiento de la extensión de lo que realmente pasa y sacar a plena luz toda la iniciativa es un gran paso para revertirlo. Ahora más que nunca vamos todos en el mismo barco.
Por: Arturo Macías Pedroza
