EDITORIAL Columnas editorial Enríquez Caricatura editorial

La corrupción y los comicios

No hagas cosas buenas...

ENRIQUE IRAZOQUI

Las cosas en la política siempre es lo mismo en México. Si uno se diera tiempo de meterse a la hemeroteca de cualquier diario serio, podría darse cuenta que los temas desde hace 23 años son los mismos: actores políticos acusando de corruptos a los del bando contrario. La lucha descarnada del poder haciendo uso de todas las artimañas posibles, obviamente utilizando los temas que en el momento estén sobre la palestra.

Cierto es que hay elemento importantísimo para toda la sociedad que ha surgido justo en la segunda parte del periodo al que hacemos referencia: el desbordamiento de la delincuencia organizada desatada desde el año 2007. Nunca antes en la historia moderna del país se habían vivido tiempos tan terribles como los que ahora se viven en materia de seguridad pública. Territorios completos de México han estado y están en manos de grupos de criminales. Con horror vemos un día sí y otros también horrendos crímenes a lo largo y ancho del país. Impunidad es la causa primera de que esto ocurra, si en el país más del 90% de los delitos cometidos no se castigan. La causa final es el principal mal de México: la corrupción.

Esto viene a cuento por el multicitado asunto de la destitución del titular de la Fiscalía Especializada para la Atención de Asuntos Electorales -FEPADE- Santiago Nieto Castillo, la semana anterior por una decisión del encargado de despacho de la Procuraduría General de la República, Alberto Elías Beltrán, quien se hizo cargo de la institución luego de la renuncia del procurador Raúl Cervantes Castillo. Elías Beltrán fundó el despido de Nieto aduciendo que éste había faltado al código de conducto e incluso transgrediendo la ley, por la información que le había proporcionado a un reportero del periódico Reforma durante una entrevista centrada en la investigación que se le sigue en la FEPADE a Emilio Lozoya, ex director general de Pemex y quien antes se desempeñara como coordinador de asuntos internacionales en la campaña del hoy presidente Enrique Peña Nieto, por una supuesta vinculación del ex funcionario con la empresa brasileña Odebrecht, famosa por su red de sobornos en varios países de América Latina. También de un par de asuntos que atañen a dos medios poderosos en México y que hoy también se ven atacados por esta guerra.

En el caso de la remoción de Nieto, más allá de qué tanta razón tuvo el encargado de despacho Elías en cesarlo, es el trasfondo del asunto. Sencillamente para el sistema priista resulta inconveniente dejar en una posición tan delicada a una persona que había demostrado una cierta imparcialidad. Con el proceso electoral para el relevo de la Presidencia de la República, el Senado y la Cámara de Diputados, es evidente que el sistema en el poder demuestra que va con todo para retenerlo, y hoy está escalando a cualquier medio para lograrlo, al igual que sus contrarios. Tan es así que se puede mencionar otros elementos que ejemplifican que el clima político en México está más que nunca enrarecido - por no decir podrido- y en el entramado de la lucha del poder, están metiendo a la controversia a lo que se pueda, con tal de la destrucción del adversario. Tan es así que dos colosos del periodismo nacional están hoy involucrados: El Universal y el diario Reforma, ambos editados en la capital del país.

En el primer caso, El Universal fue condenado en primera instancia a pagar una multa y sobre todo a ofrecer el derecho de réplica al señor Ricardo Anaya, presidente nacional de Acción Nacional, quien demandó al rotativo por una información publicada en el que acusaban al líder blanquiazul de haberse enriquecido junto a su familia política a través de su carrera política. La sentencia no ha quedado firme y El Universal ha señalado que la va a recurrir pero por el momento, este asunto es un elemento más de la lucha encarnizada por la destrucción de los enemigos políticos. Tal vez El Universal fue víctima de un manipulador o bien un juez de alzada revierta la sentencia que lo condena y eche por la borda el argumento de Anaya.

Otro elemento en esta guerra preparatoria a las elecciones, fue la publicación de la entrevista a Santiago Nieto en Reforma y que ha desencadenado el argumento para su remoción. En esta publicación se supone que Nieto filtra elementos que atentan contra el debido proceso, lo que justificaría su remoción, sólo que el ahora destituido fiscal entregó a más medios la grabación de la conversación de él con el periodista de Reforma, donde se hace evidente que la edición de la información no corresponde fielmente a lo que se habló en esa entrevista. Quizá alguien también se equivocó en la interpretación de las palabras de Santiago Nieto, lo que dio pie a la razón o excusa para que el PRI lo corriera de esa posición tan delicada, desatando el vendaval político en el que el país entero está metido.

Una verdadera guerra de lodo estamos ya viviendo, y esto es apenas el principio. Universal y Reforma pudieron ser víctimas de los hilos del poder en uno y otro sentido, Santiago Nieto pudiese ser una víctima, pero la corrupción rampante todo lo empeña y contamina, y eso desgraciadamente es lo que nos espera para los comicios del año entrante.

Leer más de EDITORIAL

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de EDITORIAL

TE PUEDE INTERESAR

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 1398597

YouTube Facebook Twitter Instagram TikTok

elsiglo.mx