A lo largo de mi vida he tenido oportunidad de visitar algunas de las más importantes ciudades y sitios de interés turístico en nuestro país. En los últimos años, he sido testigo del esfuerzo realizado por autoridades gubernamentales y sector privado, por mejorar la imagen urbana y los lugares de atracción turística: somos ya una potencia mundial en este campo. Permítaseme presentar a continuación un panorama general y algunas cifras que avalan lo anterior.
De acuerdo con el Consejo de Promoción Turística de México, el turismo es uno de los sectores económicos más importantes y dinámicos en el mundo actual, tanto por su nivel de inversión, como por su participación en el empleo, aportación de divisas y contribución al desarrollo regional. Contribuye directamente con el 10% del Producto Interno Bruto (PIB) mundial y genera uno de cada diez empleos. Por otra parte, la Organización Mundial de Turismo (OMT) estima que para el año 2030 se alcanzará la cifra de mil ochocientos millones de turistas internacionales en el mundo.
En lo referente a la economía mexicana, la importancia del turismo es evidente: además de generar empleos y ser un detonador del desarrollo local y regional, es un factor de difusión de atractivos culturales y naturales. La promoción turística, juega aquí un papel de vital importancia para consolidar a México como potencia mundial, al generar una mayor demanda para los destinos y atractivos nacionales. Según el Banco de México, la llegada de turistas internacionales se incrementó en 8.9% en los últimos años, al pasar de 32.1 millones de turistas en 2015 a 35.0 millones en 2016; los ingresos por visitantes internacionales, por su parte, se incrementaron en 10.4%, al pasar de 17 734 millones de dólares en 2015 a 19 571 millones en 2016. En relación con el número de visitantes internacionales por principales países de residencia por vía aérea, con cifras a enero-mayo de 2016-2017, los países más importantes fueron Estados Unidos con 4.6 millones de visitantes y Canadá con 1.1 millones. Los otros países de importancia son Argentina, Reino Unido, Colombia, Brasil, Alemania, Francia, España, Chile, Perú, Italia.
En este momento resulta necesario precisar qué se entiende por turismo. Para la OMT, el turismo consiste en aquellas actividades que las personas realizan mientras están de viaje en entornos donde no es habitual que se encuentren, cuyos fines son el ocio, los negocios u otros, y duran periodos inferiores a un año. En las últimas décadas el turismo se ha convertido en una de las industrias más importantes a nivel mundial, debido en gran parte a la intensa promoción de viajes de todo tipo, dígase descanso, ocio, negocios, cultura o interés social. En épocas recientes se ha popularizado también otros tipos de turismo, destacan: el turismo rural, formativo, ecoturismo, gastronómico, y de aventuras por citar algunos.
En relación a nuestro país, en días pasados, el gobierno mexicano, a través del Presidente de la República, afirmó que pese a los sismos, México está de pie y sigue firme para recibir a los turistas. Por mi parte, estoy convencido del potencial de México en materia turística, a pesar de las recientes adversidades, por dos razones fundamentales: por su gran riqueza cultural y por la apertura de su economía al mundo a partir de los años ochenta. En materia económica, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) en 2015, la actividad turística en México aportó el 8.7% del PIB. Esto significa que en ese año, el sector contribuyó con 8.7 pesos de cada 100 pesos producidos; además de generar 2.3 millones de empleos, lo cual representa el 5.8% del total nacional. Con cifras de INEGI, los principales servicios ofrecidos corresponden a los de alojamiento, transporte de pasajeros, restaurantes, bares y centros nocturnos.
Para concluir, cito un párrafo alentador de una de tantas empresas extranjeras con inversiones en nuestro país: "México es un País pleno de colores, sabores, sonidos, tradiciones e historia únicos en el mundo. Su hospitalidad le ha ganado reconocimiento como país anfitrión por excelencia, donde la calidez de su gente, su alegría, su profesionalismo y su entrega hacen que cada visita a México sea única e inolvidable. Con una superficie de 2 millones de kilómetros cuadrados, constituye un muestrario inagotable de sol, playas, cultura, naturaleza, magia, texturas, aventura y diversión". En materia de riqueza cultural los mexicanos debemos sentirnos orgullosos, ya que a pesar de sismos, subdesarrollo político y bajo crecimiento económico, el potencial turístico existe.
(Economista)
