'Se trata de reportajes periodísticos, hechos al vuelo sobre muchos lugares visitados en relativo poco tiempo”, Antonio de Juambelz y Bracho, fundador de El Siglo de Torreón.
El testimonio y las impresiones observadas de manera aguda en una serie de viajes por el mundo, fue narrada por uno de los decanos del periodismo en México, Don Antonio de Juambelz y Bracho, fundador de El Siglo de Torreón y creador además de El Siglo de Durango, en un libro publicado en 1957 bajo el título "Impresiones de viaje", contó anécdotas y compartió su visión del mundo antes y después de la Segunda Guerra Mundial.
La reedición de "Impresiones de viaje", sesenta años después de su primera publicación, será presentada el próximo martes 22 de agosto a las 7:30 de la noche en las instalaciones de El Siglo de Torreón, ubicadas sobre la avenida Matamoros número 1056 poniente, y contará con los comentarios de los colaboradores de esta casa editora Gregorio Muñoz y Domingo Deras.
La reedición, en su sesenta aniversario, fue realizada en Celsa Impresos, y hace parte de las actividades por el 95 aniversario de El Siglo de Torreón, cuenta además de los textos publicados por Don Antonio de Juambelz, con una serie de fotografías que apoyan de manera visual las crónicas.
EL OFICIO DE NARRAR
El libro recopila una serie de artículos publicado por Don Antonio en El Siglo de Torreón, divididos en dos partes, "Alrededor del mundo", viaje realizado entre 1934 y 1935; y "Corriendo el mundo", resultado de sus viajes entre 1956 y 1957.
Don Antonio definió, en sus propias palabras, la edición:
"Aunque a los periodistas nos está permitido escribir sobre la rodilla y tener la audacia de querer interpretar situaciones y hechos que no hemos tenido tiempo de conocer a fondo, cuando menos debemos advertir que no hemos pretendido hacer ensayo, sino simplemente referir lo que vivimos y sentimos durante nuestro recorrido".
En su libro, el fundador de El Siglo de Torreón agradece a su inolvidable amigo Luis Reyes Spíndola, compañero de viaje y uno de los impulsores de la publicación.
Con un lenguaje preciso, sobrio y sencillo, Don Antonio retrató como una acuarela, su impresión de ciudades como San Francisco, a la que definió como la ciudad señora; Hawai, tierra de flores y vivero de cultura; el Japón moderno e imponente; China la mártir, o Roma a vuelo de pájaro.
Los textos además están llenos de impresiones sobre culturas, aromas, detalles que los periodista suelen observar para construir una impresión acertada de ese lugar que causa asombro por sus costumbres, el color de su gente y las tradiciones que los definen.
DETALLES PARA APRENDER
En su viaje por Alemania, Don Antonio registró, entre otras cosas, su asombro de la arquitectura de ciudades como Munich y esos edificios de estilo gótico y torres con cúpulas en forma de cebolla, donde el nazismo pavimentó con losas de granito un parque, para que sirviera de parada militar para las actividades proselitistas de Hitler.
De la imponente ciudad de Frankfort, y su abolengo histórico desde el siglo VIII, narró la forma como resurgió luego de los horrores de la guerra, y escribió el testimonio de los bombardeos que le hizo una joven con quien entabló amistad durante el viaje.
Datos como la forma en la que convivían los creyentes de tres religiones monoteístas a mitad del Siglo XX, en Jerusalem, o sus impresionantes templos, son detalladas en su texto El templo de Salomón.
La independencia de Marruecos; Jordania, estado artificial; Venecia, balcón al oriente; El ballet soviético; y El Egipto milenario; son algunos de los capítulos que hacen parte de la serie de crónicas que integran la edición que se presentará el próximo martes 22 de agosto en las instalaciones de esta casa editora.
UN LENGUAJE PARA TODOS
Con la vocación clara de un oficio que tiene que llegar a todo tipo de lectores, el periodista registra sus impresiones con detalles concretos, pero que permiten una lectura ágil, que no sólo transporta a esos lugares, sino que entrega detalles históricos, culturales y contextos enriquecidos.
La edición, publicada por primera vez hace sesenta años, además confirma otra tarea en la que El Siglo de Torreón se ha mantenido constante, la edición de libros que contribuyen no sólo a la promoción de la lectura, sino al crecimiento de un acervo periodístico de nuestra región.
En 1919, don Antonio ya se dedica de lleno al periodismo como reportero de "El Heraldo", de Chihuahua, mismo que desaparece al poco tiempo, al ocurrir la rebelión de Aguaprieta contra el gobierno de Venustiano Carranza y la cual terminó con el asesinato del Barón de Cuatro Ciénegas.
Luego aceptó una invitación para fundar un periódico en Saltillo, el cual se llamó "Coahuila" y en él estuvo trabajando hasta el año 1921, fecha en la que se trasladó a Torreón, porque iba a fundarse el periódico "El Siglo".
El 28 de febrero de 1922 hace su aparición el primer número de "El Siglo", fundado por Joaquín Moreno y don Antonio de Juambelz y Bracho, en 1927, don Antonio decide cambiar el nombre del periódico, con la finalidad de darle más identidad a la joven y pujante ciudad en donde se editaba y es de esta forma que, de "El Siglo", pasa a llamarse "El Siglo de Torreón".
Su visión del mundo a través de sus viajes es reunida en la reedición que se presentará.
Para asistir
La presentación del libro tendrá lugar:
⇒ Este martes 22 de agosto a las 7:30 de la noche.
⇒ En El Siglo de Torreón.
⇒ Entrada libre.
