Opinión. Para integrantes del Centro de Derechos Humanos Juan Gerardi, son preocupantes las declaraciones del presidente Peña Nieto. (AGENCIAS)
Para Antonio Esparza, integrante del Centro de Derechos Humanos Juan Gerardi, es preocupante que el Presidente de México Enrique Peña Nieto haya negado que su gobierno sea un espía de periodistas y activistas, cuando aún no ha iniciado una investigación, y más aún, cuando anunció que se aplicaría contra quienes han acusado falsamente a su gobierno.
"Me parece muy preocupante porque todavía no inicia la investigación que apenas se está armando, cuando él ya está negando el hecho, eso habla de entrada que está exonerando a quién resulte, y también está diciendo que el gobierno no lo hace".
Lo conveniente, es que se realice una investigación independiente, "porque realmente no le vamos a creer al gobierno, si el propio Peña Nieto es el jefe de todos, tanto de la PGR como de Gobernación, no podemos esperar algo que nos dé certeza".
Y es que apenas ayer, el presidente ordenó a la Procuraduría General de la República actuar rápido en torno a las acusaciones por espionaje a activistas, defensores de derechos humanos y periodistas, y aplicar la ley a quienes han acusado falsamente a su gobierno. Y negó las supuestas intervenciones sobre la vida de los ciudadanos.
Dijo que es doblemente preocupante, el hecho de que anunciara castigo a quienes han acusado falsamente a su gobierno, "con ello estamos encontrando que quien cuestione alguna actuación del gobierno, ahí está el peso de la ley. Vemos actitudes de intolerancia".
