El lunes pasado se realizó en las instalaciones "Encuentro Siglo, Hacemos Comunidad", en su tercera edición, contando con la participación de los presidentes estatales de PAN, Bernardo González y de la doctora Miroslava Sánchez de Morena. Obviamente se le había corrido la invitación a la presidenta estatal del PRI, la diputada local Verónica Martínez para que asistiera. La invitación se le había hecho con 20 días de antelación y aunque había confirmado en un par de ocasiones su presencia, de "última hora" reculó, cediendo su lugar al señor Demetrio Zúñiga, secretario de Acción Electoral del PRI en el estado, quien mostró tablas y defendió con entereza sus posturas.
El evento fue transmitido en vivo por el Grupo Radio Estéreo Mayrán por las plataformas digitales de El Siglo de Torreón como del mismo GREM. La conducción fue realizada por la periodista Marcela Pámanes, quien en todo momento supo guiar el intercambio de opiniones y de acusaciones que por naturaleza se proferían los participantes.
Transcurrieron noventa minutos en los que los tres actores principales tuvieron oportunidad de compartir sus propuestas así como de hacerse señalamientos ante un público presente en la sala de realización, que en ocasiones no se contenía y ante ciertas respuestas de los participantes emitía onomatopeyas que daban cuenta que había simpatía o animadversión para alguno de los exponentes.
La sensación inicial es que podría pensarse que el evento estaba creado para que los representantes de la oposición, ya fuera Gómez de Acción Nacional o Sánchez por Morena, pudieran vituperar al partido gobernante, quien en esta ocasión no encontraría un foro a modo. Craso error de todos, Encuentro Siglo no tiene ninguna intención de favorecer o perjudicar a ningún grupo, este espacio está creado para que bajo el marco del respeto y equidad, se puedan contrastar ideas, cuestionar comportamientos y acciones públicas, nada más.
El resultante de la sesión fue satisfactorio en términos generales, aunque con algunas áreas de oportunidad. Claramente no se pudo conseguir que los expositores fueran más precisos a la hora de plantear las propuestas de sus partidos de cara a la renovación del gobierno del Estado el próximo diciembre. La audiencia en términos generales no sabe qué esperar respecto a la postura que asumiría el nuevo gobierno en caso de que emanara de cualquiera de estas tres fuerzas políticas ante los nuevos retos que se avecinan en Coahuila, como lo es el afrontar la era Trump, por citar un ejemplo.
Quedan poco más de tres meses para que se lleven a cabo las elecciones en el Estado, donde se habrán de renovar tanto la gubernatura como el Congreso local y las alcaldías de los 38 municipios, con la particularidad que estas últimas sólo observarán un período de un año, por aquello de la Reforma Electoral. Por ello, los tiempos de campaña real que ya han comenzando subirán al máximo el ambiente político en el Estado y como es natural todos los actores pretenderán llevar agua a su molino.
Faltan tres eventos de Encuentro Siglo antes de los comicios. Con lo cual hay esperanzas de que éstos sean espacios para el intercambio de más ideas, de más propuestas y por supuesto de más señalamientos.
Muy lamentable fue en esta ocasión la ausencia de la presidenta Verónica Martínez, por la manera como canceló su participación la deja como una persona carente de seriedad en sus compromisos, por decir lo menos. Verónica ha sido un cuadro renovador en la estructura de su partido y no obstante su juventud y su condición de mujer (en este injusto entorno todavía machista) se ha construido una carrera fulgurante dentro del PRI. Aunque hay que señalarla, esta es la segunda ocasión que funge como diputada local, en la primera ocasión fue parte de aquella ominosa fracción priista que legalizó la megadeuda estatal y que con ello regaló impunidad a los responsables de aquel desfalco multimillonario a varias generaciones coahuilenses.
