— Joseph Pullitzer
Mucho del éxito de la revista “Time” se debe a los parámetros adoptados desde su primer número: combinar el entretenimiento con la síntesis, incluir ilustraciones y resumir el contenido a modo de que hasta las personas con menos tiempo para consumir noticias, puedan estar bien informadas.
Persona del Año es un suplemento de la revista que se edita anualmente desde 1927, cuando deciden nombrar a Charles Lindbergh como “Hombre del año”. En el afán de significar la paridad de género y no caer en conductas sexistas, hacia 1999 el título pasó de Hombre del año a Persona del Año, sin embargo, pocas mujeres han sido merecedoras de dicho galardón.
Ser nombrado Persona del Año por la revista “Time” no necesariamente implica un premio, distinción, reconocimiento o apoyo. La que es una de las publicaciones más visibles de la historia desde su fundación, en 1923, a menudo coloca en portada a quien influye para bien o para mal en el curso de los acontecimientos de envergadura mundial.
En distintas ocasiones, el criterio editorial de la revista a la hora de elegir al personaje que engalane sus páginas ha sido cuestionado por los lectores. Basta con recordar el caso más sonado: Adolfo Hitler fue la Persona del Año en 1938, y Joseph Stalin apareció en dos ocasiones (1939 y 1942).
Otros ejemplos que causaron enorme polémica fueron el Ayatola Jomeini de Irán, el Rey Faisal de Arabia Saudita y, en fechas más recientes, George W. Bush a raíz de su decisión de declararle la guerra a Al Quaeda e incursionar en un conflicto bélico en Medio Oriente.
2016 no será un año exento de controversia para la revista TIME. Y es que en esta ocasión, los editores eligieron a Donald Trump como Persona del Año. “Trump recuerda que la demagogia se alimenta de la desesperación y que la verdad es tan poderosa como la confianza que tenemos en aquellos que la pronuncian”.
En entrevista con una cadena de televisión norteamericana, Nancy Gibbs, editora en jefe de TIME, calificó al hoy presidente electo como un fenómeno nunca antes visto que desafió todas las expectativas, reglas e irrumpió en la arena política de una forma muy poco convencional.
Por su parte, la revista explica su decisión, un tanto irónica y cargada de la irreverencia con la que cubrieron y proyectaron la figura del magnate durante la campaña, de la siguiente forma: “Cada diciembre, Time nombra a la persona que tuvo mayor influencia, para lo bueno y lo malo, durante el año. Entonces: ¿qué fue este año? ¿bueno o malo? El desafío para Donald Trump es cuán profundamente el pueblo no está de acuerdo con la respuesta”, remata.
A horas de conocer la decisión (la terna final incluyó tanto a Trump como a Hillary Clinton), la reacción de cólera y también de júbilo es enorme, muy en el tono con las pasiones que desata el presidente electo.
Una sutileza de la fotografía que aparece en portada, y que ha fomentado amplia especulación, recae en el hecho de que Donald Trump aparece sentado en una posición muy similar y en una silla bastante parecida a la que utilizara Adolfo Hilter cuando fue Hombre del Año.
También, para el arcano de lo chusco, el hecho de que fue la propia TIME quien hace un par de años incluyó al presidente Enrique Peña en su portada bajo el título “Saving Mexico” (Salvando a México). Cómo han cambiado las cosas…
Nos leemos en Twitter y nos vemos por Persicope, sin lugar a dudas: @patoloquasto
