— Mijaíl Bakunin
Benito Juárez es la demarcación más rica no sólo de la ciudad de México sino del país. Al contrario de Iztapalapa, que se pobló con asentamientos irregulares a los que no se podían dar servicios públicos de forma adecuada, Benito Juárez se trazó y construyó en la primera mitad del siglo XX de manera ordenada y con buena infraestructura. Los habitantes de la delegación no están acostumbrados a sufrir carencias en servicios básicos.
No, por lo menos, hasta ahora. En las últimas semanas los benitojuarenses han sufrido una notable escasez de agua. Algunas zonas llevan varias semanas sin el líquido. No es ésta, sin embargo, una época en la que habitualmente se genere escasez de agua. Las presas del sistema Cutzamala que surten a la ciudad de México estaban llenas a un 97 por ciento a fines de octubre (Conagua ha sido negligente y no ha dado a conocer información para noviembre).
La gente de la delegación atribuye esta escasez a la construcción de nuevos edificios, pero desde hace años la zona se ha venido construyendo hacia arriba sin que se hayan generado los problemas que hoy estamos viendo. La explicación de lo que ocurre, la cual de hecho preocupa más que la misma escasez, la da en una entrevista a Radio Red el director general del Sistema de Aguas de la Ciudad de México, Ramón Aguirre Díaz, un funcionario con toda una vida dedicada al agua. En Benito Juárez no hay agua porque ha habido una serie de ataques vandálicos contra los pozos de extracción.
En este momento 13 pozos de la delegación Benito Juárez están fuera de funcionamiento por vandalismo. Hubo también "vandalismo severo" en Iztapalapa, pero los pozos ya han sido reparados. En cambio hoy se está viviendo una grave crisis de agua en Benito Juárez. Entre 300 mil y 400 mil personas no tienen el servicio o están sufriendo una reducción notoria en el suministro como consecuencia de estos ataques.
Mucha gente tiene la idea de que la ciudad de México vive solamente del agua del sistema Cutzamala. Pero una parte muy importante del aprovisionamiento proviene de pozos. El Sistema de Aguas opera unos 430 pozos que aportan unos 600 litros por segundo cada uno. El valle de México tiene serios problemas de agua incluso en las mejores circunstancias. Pero cuando se registran ataques como éstos es muy difícil mantener el suministro de forma normal.
En un principio, me dice Ramón Aguirre, se registraban sólo robos de cable de cobre. A pesar de los problemas que esto ocasionaba, era relativamente sencillo y barato hacer los remplazos y las reparaciones. En los últimos tiempos, sin embargo, los vándalos han decidido también robarse los "arrancadores". Extraen el mecanismo y dejan la carcaza sin nada dentro. Estos equipos son mucho más difíciles de remplazar.
El robo del cable puede tener un propósito económico, aunque el precio al que se paga el material sustraído es muy pequeño. "Lo que nos roban lo han de vender en tres pesos", dice Aguirre. En el caso de los equipos, no parece haber ninguna motivación de retribución económica. Los arrancadores no sirven para nada fuera de los pozos en los que están colocados. Estos actos de destrucción no tienen más propósito que el gozo mismo de destruir.
El gobierno de la ciudad de México está empezando a tomar medidas para proteger los pozos, los cuales funcionan sin operadores humanos. Se les están colocando, por ejemplo, rejas de protección. También se están habilitando cámaras para detectar a los grupos que llevan a cabo la destrucción.
De todas formas es inquietante que los actos de estos vándalos estén dejando sin agua a cientos de miles en la ciudad de México. sólo por el placer de verlos sufrir.
BLACK FRIDAY
En el "buen fin" mexicano las fronteras tenían líneas kilométricas... para cruzar a Estados Unidos porque los precios seguían siendo menores del otro lado. Tanto más en este black Friday en que los descuentos llevan los precios a una fracción de los de México. El problema es que en nuestro país los impuestos son mayores.
Twitter: @SergioSarmiento
