Asegura. El alcalde Luis de Villa Barrera, considera que hay dolo o mala fe en las últimas acciones realizadas por parte del IMSS. (ARCHIVO)
Tras el cuarto intento de embargo de bienes inmuebles por parte del IMSS al Sapal, el alcalde Luis de Villa Barrera considera que el Instituto está actuando con dolo o mala fe hacia el organismo operador de agua.
"Yo ya empiezo a pensar, como dicen mis abogados, con el sospechosismo de que hay dolo o mala fe. No procedió el embargo porque se tenía la suspensión de actos por parte de los juzgados. Este asunto está estancado, ya no ha habido ningún intento de negociación y seguiremos por la vía jurídica", dijo el alcalde.
Como se ha informado, el Sapal tiene un adeudo de 20 millones de pesos que data desde administraciones anteriores por concepto de cuotas obrero-patronales y de retiro, censantía y vejez de 180 trabajadores de la paramunicipal, pero fue hasta la presente administración que el IMSS ejecutó acciones como el embargo a causa de esta deuda, por lo que el Ayuntamiento espera pagar una cantidad menor ante la posible caducidad o prescripción de los adeudos anteriores de 2010.
"Se busca negociar sobre lo posterior a julio de 2010 y que todo lo de esta administración quede cubierto. No me atrevo a decir si vamos o no a dejar deuda en este sentido porque dependerá de cuánto será la cantidad final, pues nos van presentando (el IMSS) nuevos créditos no contemplados a los anteriores", dijo el alcalde.
El presidente municipal Luis de Villa, declaró que continuarán trabajando en base las disposiciones jurídicas.
"Estamos entablando las acciones legales pertinentes, además hemos tenido las previsiones jurídicas necesarias para evitar más embargos por parte del Instituto Mexicano del Seguro Social", dijo De Villa.