Cultura

El Quijote, 400 años

La colección "Juan Sedó"

Libro. Afirma que dicho coleccionismo quijotil se inició en el penúltimo tercio del siglo XIX.

Libro. Afirma que dicho coleccionismo quijotil se inició en el penúltimo tercio del siglo XIX.

Juan A. García Villa

En los tres artículos anteriores hice aquí breve reseña de cada una de las tres principales colecciones particulares de ediciones de El Quijote que hay en México, cuyos titulares, ya fallecidos, fueron: Eulalio Ferrer, Carlos Prieto y Franz Mayer.

¿Qué tan grande o importante es cada una de esas colecciones? Para valorar su dimensión es necesario compararlas con la del mayor número de ejemplares que ha existido, en la inteligencia de que difícilmente podrá haber en el futuro otra que la iguale y menos aún que la supere. Se trata de la que formó el abogado y empresario catalán Juan Sedó.

Antes de continuar, debo decir que he considerado pertinente abordar el tema de las colecciones de El Quijote porque nos da idea no sólo de la importancia en sí de la genial novela, sino de la pasión que provoca en algunas personas, cultas y de elevado espíritu. Creo que se trata de un importante dato adicional que nos puede mover a interesarnos en la lectura de la inmortal fábula cervantina, pues no son muchas las obras literarias que despiertan este fervor. Por algo será. Conviene tenerlo presente.

Juan Sedó Peris-Mencheta nació en Barcelona en 1908 y murió en esta misma ciudad en 1966. Vivió pues sólo 58 años. De familia de industriales textiles catalanes heredó de sus ancestros una gran inquietud intelectual. Fue destacado empresario y alguna vez diputado provincial. En 1948, a la edad de 40 años, ingresó como miembro de la Real Academia de las Buenas Letras de Barcelona.

En 1926, a la edad de 18 años y dos antes de terminar la carrera de Derecho, inició Sedó su colección cervantina, particularmente de ediciones de El Quijote. En 1942 alcanzó de éstas su ejemplar número mil. En 1948 al ingresar a la mencionada Academia contaba ya con 1,381 ediciones en 46 distintos idiomas.

Hacia abril de 1959 su colección sumaba 2,047 ediciones en 3,873 volúmenes (toda vez que algunas ediciones comprenden dos o más) en 53 idiomas. Del siglo XVII son 53 y 124 del XVIII. En 1968, dos años después de su muerte, su colección ingresó a la Biblioteca Nacional de España.

Su discurso de ingreso en 1948 a la Academia de las Buenas Letras lo tituló "Contribución a la historia del coleccionismo cervantino y caballeresco", que ese mismo año publicó en forma de libro. En éste agregó información muy completa sobre las más importantes colecciones de El Quijote. Asimismo relata con emotividad las vivencias y sufrimientos que suelen tener los bibliófilos.

En su libro afirma que dicho coleccionismo quijotil se inició en el penúltimo tercio del siglo XIX y adquirió especial auge a partir de 1905, con motivo del tercer centenario de la publicación de la I Parte de la novela. Ofrece asimismo la información más completa que pudo obtener sobre 29 colecciones ya inexistentes en ese año de 1948 (dos públicas y 27 particulares, pues muchas de éstas dejan de existir al fallecer sus iniciadores), así como de 44 entonces existentes, 17 públicas y 27 particulares.

No deja de llamar la atención que Sedó, a pesar de lo muy informado que estaba sobre el tema, ninguna referencia hace en su libro a las colecciones de Franz Mayer y Carlos Prieto, que hacia 1948 seguramente eran más importantes que algunas de las 27 particulares entonces existentes reportadas por Sedó.

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Escrito en: Miguel de Cervantes Saavedra El Quijote

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