Pendiente aún la declaratoria

El Municipio aún está en el proceso de integración de expedientes que justifiquen la solicitud de declaratoria de zona de desastre por los efectos de las lluvias de este mes, aunque para cumplir con este requisito dispone de los próximos 20 días.

A través de dicha declaratoria, las autoridades de Gómez Palacio aspiran a obtener recursos federales para aplicarlos en la reparación del pavimento y del drenaje, la construcción de dos sistemas pluviales y mejoras a más de 500 viviendas afectadas.

El alcalde, José Miguel Campillo informó que se están elaborando los dictámenes de las calles, cuyo pavimento resultó dañado por las inundaciones y encharcamientos, al igual que en el caso de los colectores del drenaje que están colapsados porque se vieron rebasados por los volúmenes de agua.

Continúa también la inspección a las viviendas para detectar afectaciones y el tipo de reparaciones que requerirán.

De acuerdo con los cálculos del Municipio, tan sólo para el drenaje se necesitarán unos cien millones de pesos, puesto que también se está considerando la urgencia de construir dos sistemas de drenaje pluvial para los sectores de Hamburgo y las colonias que se ubican en la prolongación de la avenida Morelos, al norte de la ciudad.

En el caso del pavimento harán falta entre 70 y 80 millones de pesos, más otros 20 millones para reparar las casas dañadas.

AÚN NO LLEGAN APOYOS POR EMERGENCIA

Tras la declaratoria de emergencia que la semana pasada emitió la Secretaría de Gobernación, el Municipio desconoce aún la cantidad de apoyos en especie que entregará a sus habitantes.

Cobijas, colchonetas y despensas constituirán la ayuda que se hará llegar a familias de las zonas más afectadas por las lluvias registradas entre los días 11 y 17 de este mes.

Al respecto, el regidor panista, Ángel Orona consideró que la entrega de este tipo de materiales es una medida populista, pues si bien hay familias que se quedaron sin abrigo ni un lugar para dormir, es poca la ayuda tomando en cuenta que fueron más graves los estragos ocasionados por el agua en sus viviendas.