Este año aumentó enormemente el número de personas perdidas en estas jornadas donde se concentran hasta dos millones y medio de personas en un mismo lugar.
Casi siempre se trata de ancianos de Árica y Asia, apenas alfabetizados, que se extravían en el enorme campamento de tiendas blancas donde se alojan los peregrinos y que tiene sus calles identificadas con colores, letras o números para orientar a los peregrinos.
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Este año aumentó enormemente el número de personas perdidas en estas jornadas donde se concentran hasta dos millones y medio de personas en un mismo lugar.
Casi siempre se trata de ancianos de Árica y Asia, apenas alfabetizados, que se extravían en el enorme campamento de tiendas blancas donde se alojan los peregrinos y que tiene sus calles identificadas con colores, letras o números para orientar a los peregrinos.
Este año aumentó enormemente el número de personas perdidas en estas jornadas donde se concentran hasta dos millones y medio de personas en un mismo lugar.
Casi siempre se trata de ancianos de Árica y Asia, apenas alfabetizados, que se extravían en el enorme campamento de tiendas blancas donde se alojan los peregrinos y que tiene sus calles identificadas con colores, letras o números para orientar a los peregrinos.Fotos: EFE y Reuters
13 de enero 2006
