Los hijos de Diana de Gales, los príncipes Guillermo y Enrique, se mostraron hoy sonrientes y relajados en el enlace de Carlos de Inglaterra y Camilla, la mujer a la que el mundo acusó de romper el primer matrimonio de su padre.Carlos y Camilla, separados por el rigor protocolario en tantos actos oficiales, confirmaron al mundo el triunfo de un amor que ha sobrevivido más de treinta años a todo tipo de presiones.
Foto: EFE; REUTERS; AP 09 de abril de 2005
publicada el 09 de abril de 2005