Con pantalón, camiseta sin mangas y chaleco fosforescentes, además de lentes oscuros, el artista comenzó su espectáculo con Mala mía y Corazón.Por segunda ocasión en la región, el colombiano trajo su “perreo” alborotando al público que acudió anoche al Coliseo Centenario, en especial a las mujeres, cuyos gritos estremecieron el lugar desde que el artista salió al escenario y hasta que se retiró.
Autor: ERNESTO RAMÍREZ CAMACHO, publicada el 06 de junio de 2019