En sólo cuatro minutos, las cuerdas fundieron dramatismo y vitalidad, los más fieles seguidores de la tapatía entonaron la canción, y ella, Elan, se mostró más tranquila al percatarse que su música gusta en la Comarca Lagunera. Elan terminó su concierto a las dos de la madrugada.
En sólo cuatro minutos, las cuerdas fundieron dramatismo y vitalidad, los más fieles seguidores de la tapatía entonaron la canción, y ella, Elan, se mostró más tranquila al percatarse que su música gusta en la Comarca Lagunera.
Elan terminó su concierto a las dos de la madrugada.Foto: Ramón Sotomayor
01 de diciembre de 2003
publicada el 01 de diciembre de 2003