¨El subconsciente¨

German de la Cruz Carrizales

        

Recuerda…

“El Subconsciente”. Algunos estudiantes, me han hecho la siguiente pregunta: Si nuestro corazón está aquí en el lado izquierdo de nuestro pecho, el hígado esta en otro, los pulmones acá, etc., ¿en dónde está el subconsciente?

Podríamos pensar que se encuentra en nuestras “Frecuencias Cerebrales”. Por lo tanto, analizaremos estas frecuencias, en las que se mueve nuestro cerebro.

“Nivel beta (Consciente)”. (20 ciclos por segundo) este es un nivel exterior, un nivel consciente, donde usamos los cinco sentidos fiscos (tacto, gusto, olfato, oído y vista) y donde apreciamos lo que nos rodea. 

Ahora que usted está leyendo este capítulo, tal vez este oyendo los ruidos de la calle, las voces de sus hijos, oliendo el café o el desayuno que está en la mesa, sintiendo el roce de este papel en la yema de sus dedos, es decir, que está usando sus sentidos físicos. Supuestamente usted está consciente (nivel beta).

Usted se preguntará que por qué digo “supuestamente”, y la respuesta es esta: ¿Cuántas veces usted ha estado leyendo un libro y se ha tenido que regresar cinco o seis páginas porque ya no le entendió nada a la lectura? O bien, ya estando en el cine, cómodamente sentados y de pronto viene a su mente: -Cariño, ¿Cerramos la puerta de la casa? ¿Apagamos la estufa?- y ya no estamos tranquilos, y se puede dar el caso de que hasta tengamos que salir de la función para confirmar nuestra inquietud. Cuántas veces hemos cerrado nuestro automóvil y dejamos las llaves a dentro. Cuantas veces trabajando en nuestro escritorio, salimos a otra oficina a tratar algún asunto, y cuando llegamos solo hacemos un chasquido con los dedos y nos preguntamos: ¿A qué venía? ¿A qué venía? Y nos tenemos que regresar a nuestro lugar, porque ya no nos acordamos del asunto. ¿Cuántas de estas cosas no le han pasado a usted?   

El otro día nos comentaba una persona cercana a nosotros, que salió en su automóvil a comprar la carne a un establecimiento cercano a su casa, salió de éste y caminó de regreso hasta su casa, al no ver el automóvil en la cochera, pregunto que quién se había llevado el auto, a lo que respondieron sus dos hijos (quienes pudieron haber tomado el vehículo) yo no, ni yo, aquí estamos. Hasta entonces se acordó que ella lo había olvidado en aquel establecimiento.

Y cuantas cosas más nos han pasado que aun cuando hemos estado haciendo uso de nuestros cinco sentidos, realmente no estamos conscientes, es decir, nuestras frecuencias cerebrales se han salido de este nivel y se han ido a otro. 

“Nivel alpha (Subconsciente)”. Aquí usamos el sexto sentido, el subconsciente, o lo que los parapsicólogos llaman la percepción extrasensoria (ESP) aquí es cuando tenemos esos pensamientos, esas corazonadas, esos presagios, esos avisos inexplicables, donde hacemos o ejecutamos acciones que si quisiéramos llevarlas a cabo con toda conciencia, no tendríamos ni la fuerza física, ni la inteligencia, ni el valor para volverlas a hacer. 

Hace tiempo conocimos un caso muy dramático. En un pueblo, la casa no contaba con el drenaje de la ciudad y se hacía uso de las fosas sépticas, la cual estaba casi a la mitad, cuando se instaló el drenaje, la fosa  la cubrieron con una tarima de madera y le dejaron un hueco para irla llenando con ceniza, basura, tierra, etc., hasta cubrirla totalmente. 

Es esa casa vivía un niñito de aproximadamente cinco años, y ese día, por alguna razón, su hermanito mayor no fue a la escuela, así que se fueron a jugar al patio donde estaba la fosa clausurada.  

La mamá, que estaba haciendo las labores propias del hogar, estaba en la cocina lavando los traste que se habían usado en el desayuno cuando oyó que su hijo mayorcito venía corriendo y gritando: ¡Mamá, mamá!, se cayó mi hermanito al hoyo.... se cayó al hoyo.

Dice la mamá, que hasta ahí se acuerda de ella, en ese momento se desconectó de la realidad, y volvió a saber lo que estaba sucediendo hasta que tenía  al niñito cerca de una llave de agua que estaba instalada en el patio para regar los árboles, y con la manguera estaba bañando al niño accidentado. Todo lo demás lo supimos por el otro niño: La señora salió, vio una escalera bastante grande y pesada para sus fuerzas, además estaba prensada por un fierro grande, el cual fue removido sin ninguna dificultad, levanto la escalera como si no pasara nada, la enfoco al hueco de la tarima, la introdujo hasta el fondo de la fosa y ordenó  enérgicamente al niño que se subiera por la escalera, y como por un “milagro” el niño salió ileso.

Al día siguiente la señora tenía todo el cuerpo lleno de moretones, como si la hubieran apaleado. 

Tuve un compañero hace tiempo, cuando trabajaba en la industria de los fertilizantes en una empresa paraestatal, él me platicó que en alguna ocasión cuando estaba de viaje con su familia que era de Jiménez, Chih. En una curva se le poncho una llanta y salió el carro de la carretera dando vueltas y vueltas, cuando se detuvo el vehículo llantas para arriba, él y su esposa pudieron salir, pero sus hijos quedaron atrapados dentro. En la desesperación por salvarlos, cuenta que él levantó el automóvil y su esposa se metió para sacar a sus pequeños vástagos. Cuando después de salvarlos tuvo conciencia, se preguntaba, ¿Como lo hice?

¿Qué fue lo que realmente paso?: Que cuando uno entra en estado de emergencia, sus frecuencias cerebrales bajan a Alpha, las químicas del cuerpo se aceleran y en ese momento tuvieron toda la fuerza, toda la capacidad, toda la inteligencia necesaria para obtener lo que ellos querían: “Salvar a sus hijos”.

Y a usted mismo, ¿Cuántas situaciones como éstas habrá experimentado, que luego de que ya pasa la emergencia, se le seca la boca, le tiemblan las rodillas, se desmaya, sufre un shock nervioso, etc.?

Uno de los estudiantes que he tenido en mis cursos (un hombre bastante delgado) me comentaba, que la cochera de su casa está en una pendiente, y un día, andaban sus hijos jugando ahí, cuando tal vez uno de ellos movió la palanca de las velocidades y neutralizó el coche y éste se vino hacía atrás y prenso a uno de los niños contra la reja de metal.

Cuando oyó el grito de angustia de su hijo, este angustiado padre, salió a la calle y tampoco se explica cómo pudo hacer los siguientes movimientos: empujar el vehículo hacía delante (si quedaba de subida), sacar a su hijo de entre la defensa del carro y la reja, salir él mismo de la trayectoria del automóvil, porque en el momento de que dejó de empujar, el vehículo se vino hacía atrás y destruyo la puerta metálica de la cochera.

Aquí volvemos a ver, como cuando llegamos a ese nivel, podemos lograr cosas increíbles.

Bien, ustedes dirán: “¿Pero solo a través de emergencias?”. ¡No! en este nivel caemos cuando nos dormimos, cuando estamos en meditación, cuando nos quedamos en estado pasivo, relajados, tranquilos. ¿Cuántas veces ha oído usted la expresión: -Lo voy a consultar con la almohada- cuando tenemos que tomar una decisión importante y definitiva en nuestra vida?

Esa es también la razón de que la meta que hizo usted y puso debajo del colchón, donde usted pone la cabeza todas las noches que se acuesta a dormir y que era la última idea que se llevaba  su mente, porque cuando sus frecuencias se bajan a alpha (subconsciente) éste se conecta con el Depósito Universal y de ahí obtenemos todo lo que queremos.

En este nivel nos conectamos con otros cerebros, y aquí está la telepatía: ¿Cuántas veces se levanta usted acordándose mucho de una persona que hace mucho tiempo no ve, y esa mañana la encuentra en la calle, o le habla por teléfono? Lo que ha pasado, es que esa persona se acordó de usted y le envío el mensaje y usted lo capto.

En este nivel alpha, están los sueños, las pesadillas, el sonambulismo, los milagros, las coincidencias, que trataremos más adelante  con más detalle.

Si usted ha tenido un sueño que se repite constantemente, como puede ser: agua en diferentes formas, caballos desbocados, que de pronto se encuentra desnudo ante un grupo de personas, que anda en una ciudad extraña y usted se siente perdido, etc., le voy a pedir que haga el siguiente ejercicio sin hablar: “Me voy a acostar, me voy a dormir profundamente, voy a tener el sueño.... (Aquí menciona lo que ha estado soñando insistentemente), mañana que despierte, me voy a acordar del sueño y me va a llegar la información de qué me quiere decir ese sueño”, y se acuesta sin preocuparse más del asunto.

Haga el ejercicio por lo menos tres días y verá como, en un momento dado, algo le va a decir, qué es la información real del mensaje que recibe.

En mi grupo de los lunes estábamos en un estado de relajación muy profundo y un amigo después que salimos de éste nos comentó, vi a..... Un amigo muy querido que estaba pasando por una enfermedad muy difícil; lo vi muy claro aquí frente a mí. Y como lo viste le preguntamos, -¡muy mal!-. Hoy que estoy escribiendo este articulo y verificando el artículo de este viernes me encontré con la esquela de aquel amigo entrañable y le hable a mi amigo: -Carlos, dime que paso con..... –Falleció Germán- ¿cuándo Carlos? Tal día de esta semana. Oye ¿te acuerdas que el lunes pasado tú lo viste? me respondió, sí, ya no me acordaba, sé que se vino a despedir.

Recuerdo el caso de una señorita, que cuando nació uno de sus sobrinos, ella lo adopto, pues no se había casado y quería tener una ilusión en su vida.

Ese niño que al correr de los años, se convirtió en una luz, en una razón de vivir, alguien por quien trabajar, y todos los conocidos y amigos le decían a ella: -No te ilusiones, no te apasiones con ese niño, no es tuyo, el día menos pensado, la mamá  te lo reclamará-. “No importa”, contestaba ella, con que me lo dejen unos siete años.

Sucedió que de pronto ella empezó a soñar con aguas siempre embravecidas; un río que se desborda; una presa que se revienta; una tormenta huracanada, etc., es decir, siempre algo relacionado con agua, a tal grado que despertaba a media noche con la respiración agitada, con el corazón latiendo apresuradamente. Ella no se explicaba el porqué de esos sueños. Un día, su hermana, (la mamá  del niño) se lo pidió para llevarlo a un día de campo.

Ahora el niño tenía  siete años y fue acompañado de dos de sus hermanitos. 

Andaba jugando cerca de una acequia cuando de pronto, al correr detrás de una pelota, el niño perdió el equilibrio y cayó dentro de ésta, cuyas aguas agitadas sepultaron al niño y no lo volvieron a encontrar. (¿Recuerda usted el caso de la señora que al abrirse un hoyo en su casa en los noventas con la avenida del río Nazas en la Ciudad Lerdo, Dgo., tampoco se pudo encontrar?)

Cuando la señorita que lo había criado, que lo había cuidado, que lo amaba tanto, supo la noticia, casi se quiso morir.

¿Pero qué era lo que ella había estado soñando? Agua embravecida, ahí estaba el mensaje.

La otra situación fue ésta: Cuando le decían que no se “apasionara” con el niño, ella respondía: ¡Con que me lo dejen siete años! Y ese precisamente fue el tiempo que se lo dejaron. Así pues, pongamos atención a nuestros sueños, ese es un lenguaje del subconsciente y que tal vez a usted le quiere decir algo. A través de los cursos y seminarios la gente me ha dicho, que a ellos, varios de sus sueños se les han hecho realidad, incluso algunas temen “soñar” porque siempre les sucede “algo”.

Hace tiempo participamos en la conducción de un programa de televisión, llamado “Valor es”, en un programa donde tocamos precisamente éste tema, una persona nos hablaba y nos comentaba que soñó con la muerte de Octavio Paz, antes que ésta ocurriera, este famoso escritor y de quien decía ella nunca había leído nada, sin embargo estaba en sus funerales, y cuál fue su sorpresa cuando varios días después de este sueño escucha en las noticias, que Octavio Paz había muerto y cuando pasan algunas de las escenas de esta noticia ella las reconocía perfectamente (claro que ella nunca estuvo, al menos físicamente en él).

Otro beneficio que podemos obtener del nivel “alpha”, es el poder superar situaciones molestas en nuestra vida, como puede ser “obesidad”, “dolores de cabeza”, “fuegos en la boca por pisar el suelo”, “alimentos que nos hagan daño”, “clientes que no nos quieren recibir”, “deudas que no nos quieren pagar”, “puestos  que no podemos ascender”, “negocios que no quieren prosperar”, etc., es decir, cualquier problema que tengamos en la vida, todo lo que tenemos que hacer es “pedir” al momento de irnos a dormir con toda la seguridad que vamos a obtener lo que estamos pidiendo. La Biblia lo dice: - Pidan, y se les dará; busquen y encontrarán; llamen y se os abrirá. Porque todo el que pide, recibe; el que busca, encuentra; y al que llama, se le abre. Mt 7, 7 - y es que cuando dormimos y entramos a nivel subconsciente, este se conecta con el “Depósito Universal” y recordemos que ahí está todo lo que podamos pedir y en poco tiempo ese “pensamiento o idea” se hará realidad.

Hoy día hay un fenómeno muy preocupante llamado bullying que usted ha oído seguramente. Un niño muy introvertido, muy apocado, que todos sus compañeros en la escuela lo maltrataban, la maestra lo hacía menos a cada rato, de tal modo que ese día se rebeló y le dijo a su abuela: -Ya no quiero ir a la escuela, pues todos me maltratan-. Mira hijito, te voy a dar un “talismán” que me dio un mago árabe que fue mi novio cuando yo era joven, y le entregó un pedazo de madera de color negro brillante, muy profundo.

Todo lo que tienes que hacer es tomarlo muy fuerte, apretarlo con tu mano derecha y verás que todos se te va a conceder, -le auguro la anciana-.

El niño se fue muy confiado. En la primera esquina le salió al paso el bravucón del barrio y el niño confiado en el poder del “talismán” le tiro un puñetazo con tan buena puntería que le dio en el mentón al atacante y lo noqueo. Para cuando llego a la escuela ya todos los compañeros sabían de su hazaña, por lo que lo trataron como héroe ese día.

-Cómo eres mala abuelita- reclamó al regresar de la escuela. ¿Cómo es que teniendo en tu poder este poderoso talismán no me lo habías dado? –mira hijito- le contesto la abuela, no hay tal talismán, pues el pedazo de madrera es el mango de un paraguas viejo que me regalo tu abuelo, lo que realmente pasó es que tu “creíste” que tenías el poder y así sucedió.

Usted que me está leyendo no necesita ningún “talismán”, ni que le digan su horóscopo, ni su carta astral o que le lean las cartas o tantas cosas que creemos para poder vivir, el poder lo tiene usted dentro de usted mismo (ese ser supremo que muchos le llamamos Dios), en su subconsciente en los niveles alpha y Theta… Dios te bendice y te acoge!!! 

Despertar…es

“La esperanza es algo bueno, tal vez lo mejor. Y lo bueno nunca muere. Estaré deseando que estas palabras te encuentren, y te encuentren bien”. A la luz de nuestras familias, decía Jesús, “No me digas que me amas, dime como vives”. “La familia que ora unida, permanece unida”. INICIATIVA LAGUNA un proyecto de valor y de valores para los laguneros y el MUNDO!!! Estoy a sus órdenes en la dirección electrónica: [email protected]. A través de Twitter: @Germandelacruzc Lo invito a visitar mi blog con más de 720 artículos de su interés: https://www.elsiglodetorreon.com.mx/blogs/famili

“QUIEN NO VIVE PARA SERVIR, NO SIRVE PARA VIVIR”
Germán de la Cruz Carrizales
                                                                          TORREON, COAH. MÉXICO

                                                                                         MMXXIII

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