Apareció al fin el buen futbol, y sobre todo los dos goles anotados por Oribe Peralta, quien marca la diferencia cuando está en la cancha y el lagunero intervino en el primero que fue un autogol cuando El Cepillo tocaba el balón frente al portero de Costa de Marfil.
La selección mexicana fue la de sus mejores tiempos y la goleada de 4-1 da idea de lo que por fin mostró con la intervención del lagunero y de Ángel Reyna que tuvo acertadas intervenciones y haciendo el cuarto gol.
Honduras será un rival difícil, y Chepo de la Torre deberá repetir cuadro mereciendo la oportunidad los jugadores que intervinieron. La primera parte fue la mejor que ha jugado México en los últimos tiempos.
Bajaría en la complementaria cuando Costa de Marfil hizo cambios utilizando por fin a su gran estrella Didier Drogba que haría de penal el único tanto cuando exigió una falta inexistente de Gerardo Torrado.
El debut de Chaco Jiménez pasó de noche, lo mismo que la reaparición de Damián Álvarez, pues las grandes estrellas fueron jugadores mexicanos como Oribe, Reyna, Moreno, Corona y Meza, entre otros.
