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LAS VEGAS, Nevada.- Los boxeadores Johnny Tapia, de Albuquerque, Nuevo México, y Marco Antonio ?Barreta? Barrera, de Iztacalco, Distrito Federal, se enfrentarán aquí el próximo sábado sin títulos de por medio en la función denominada ?The Battle of Warriors?.
Ambos parecen destinados a ser campeones sin corona. Sin el glamour de las grandes contiendas que escenificaron aquí Julio César Chávez, Oscar de la Hoya o Salvador Sánchez, la ciudad de juego y fantasías abre sus ojos de neón ante estos dos hombres que han sido maltratados por los grandes organismos del boxeo: el CMB y la FIB.
Por obstinarse en enfrentar a Barrera, la Federación Internacional de Boxeo (FIB) desconoció a Johnny Tapia, un tipo duro, esculpido por los golpes de la vida y del ring, que prefirió dejar la corona mundial antes que perderse la oportunidad de pelear contra quien él considera ?el mejor peso pluma del mundo?: Marco Antonio Barrera.
Barreta ha sido cuatro veces campeón del mundo y Tapia cinco.
Pero paradójicamente el próximo sábado subirán al ring como simples mortales del boxeo, no con esa aureola de deidad deportiva que refulge tras un cinturón mundial.
Rostro serio, demacrado por la dieta para dar el peso, pero fuerte, Marco Antonio anunció que hará una pelea de choque, no táctica ni técnica como ante Morales o Nassem Hamed. Saldrá como fajador, algo que tal vez le lleva implícito mucho peligro.
?Quiero ofrecerle muchas emociones el público. Voy a pelear al toma y daca, pero no sucio, a menos que Tapia comience a dar cabezazos, codazos y golpes con la rodilla, como suele hacerlo?, señaló.
?Nuestra pelea será de éxtasis para la gente?, prometió el supercampeón mexicano.
Johnny ?Mi vida loca? Tapia es un tipo de aspecto patibulario, que de niño sobrevivió a una volcadura que casi lo mata y que a los ocho años de edad vio cómo mancillaron a su madre y la asesinaron con un destornillador. Cuerpo lleno de tatuajes, uno de ellos enorme, con la imagen de la Virgen de Guadalupe en el pecho, parece un personaje salido de ultratumba.
Y lo es: ha muerto en tres ocasiones y las tres veces volvió.
?Primero morí en vida en la cárcel, y salí; luego caí al abismo de las drogas, y salí. Y después intenté suicidarme. Y sobreviví. Con el boxeo he buscado desquitarme de las tragedias de mi existencia?, relató.
Y añadió: ?Tal vez esté loco, pero quiero hacer una pelea limpia ante Barrera, buena, como la gente la espera? Y, amigos bajo el ring, rivales en el boxeo, Tapia y Barrera (cuyo apellido materno es también Tapia) se retaron amigablemente: -El que gane va a invitar los tequilas, dijo ?Mi Vida Loca?.
-Pues yo no tomo, pero después de la pelea te voy a invitar a cenar, contestó Marco Antonio.
Y Tapia lo elogió: ?Estoy muy contento porque voy a pelear contra el auténtico rey de peso pluma, el mejor del mundo. Lo demostró al vencer a Erik Morales y a Nassem Hamed, pero ahora tiene que ganarme a mí, aunque yo ya tenga viejo el cuero?.
El ganador de este combate podría enfrentar a Nassem Hamed o bien al vencedor del duelo del 16 de noviembre en esta ciudad, entre Erik Morales y el texano Paulie Ayala, quienes se disputarán la corona mundial pluma que quedó vacante cuando Barrera derrotó al Terrible y no quiso aceptar el cinturón del Consejo Mundial de Boxeo Consejo Mundial de Boxeo.
En las apuestas de los principales casinos de esta ciudad Barrera se encuentra arriba por momios de 4 a 1.
