Hay que ser muy claros; quizá nos tocó el rival más sencillo a vencer dentro de la ronda de cuartos de final. Por supuesto que parto del hecho de que no hay equipo fácil ni partido sencillo, ya no se diga en la Primera División de México, sino en el futbol mundial. Pero es una realidad que los actuales Pumas del Tuca Ferreti no asustan a nadie y que las tres bajas importantísimas que tienen por jugadores en la selección pueden pesarles bastante.
Pumas no representa tanto peligro, pero América tampoco lo mostraba y aún así le ganó a Santos. En la última jornada vimos tristemente a unas Águilas espantadas por quedar fuera de la liguilla. Apenas consiguieron su gol y al puro estilo de Romano se echaron para atrás para defender su tanto con todas las de la ley, cosa que consiguieron de milagro. Santos optó por darle juego a mediocres futbolistas que siguen demostrando el porqué no deben continuar en el equipo. Y ante esa mediocridad, y tras la derrota, Santos cayó hasta la quinta posición y ahora las cosas se tornan complicadas.
Lo único de llamar la atención de los mencionados Pumas es su impenetrable defensa, es simplemente la mejor que ha existido en todos los torneos cortos, pero quiero invitar a Rubén Omar Romano a que esta estadística, real e impresionante, en vez de ser una futura excusa de por qué el equipo quedó eliminado y por qué no se les pudo anotar gol, si se enfrentaron a los mejores defensores, sea, en cambio, un reto. Pumas tiene la mejor defensiva de la historia de estos minitorneos, es cierto, pero ¿por qué no buscar las cualidades, que sí existen, en el equipo del Santos, en lugar de estar asustándose por lo que muestre el rival (hay que recordar que a Romano llegaron a preocuparle los astros del balón, ahora descendidos: el Maleno Frías y Jair García, cuando los Guerreros enfrentaron a Indios, partido del todo patético).
Un equipo con la solvencia económica del Santos Laguna, no está para andar mendigando resultados, por eso confío en que Romano afrontará este partido como lo que es el Santos, un equipo grande en los últimos tiempos, que de paso tiene una deuda pendiente con los Pumas, que eliminó a los Guerreros la última vez que se enfrentaron en liguilla cuando los de casa quedaron primeros generales por primera vez en su historia. Hay material. Hay con qué ganar.
