Ocupados en la llegada de Cuauhtémoc Blanco al Santos Laguna, su participación en esta liguilla, así como en las hazañas de Daniel Emmanuel Ludueña, Vicente Matías Vuoso y Oswaldo Sánchez, los medios han olvidado mencionar lo que está haciendo Rafael Figueroa.
Este jugador lagunero, conocido como “Hércules” por la fuerza con que llega en las jugadas, surgió de las fuerzas básicas del Santos y tiene tiempo mostrando capacidad y convirtiéndose en uno de los mejores representantes del fair play.
A pesar de que en su posición se tienen que mostrar a cada instante cualidades especiales sin lastimar al contrario, Rafael en toda la campaña regular y lo que va de la liguilla acumuló solamente tres tarjetas amarillas y ninguna expulsión.
En el minuto 87 de la segunda jornada entre Santos y Pumas le mostraron su primera tarjeta. La segunda fue al minuto 29 jugando Monterrey contra Santos, y la tercera y última sería en el minuto 84, jornada diez, del Toluca-Santos.
Una de sus mejores y más limpias actuaciones la brindó apenas el pasado sábado en el partido de vuelta ante San Luis, donde varias veces dio muestras de su capacidad y su forma de quitar balones al rival, especialmente cuando ayudaba a cubrir su extremo derecho.
Rafael, orgullo de Torreón Residencial, llegó muy joven al Santos Laguna. Para su formación y fogueo fue enviado a los equipos de ascenso Santander, León y Coatzacoalcos, y en el Apertura 2005 llegó para ser titular en el primer equipo. Honor pues a quien lo merece.
