Con saldo favorable concluyó el fin de semana taurino en nuestra Comarca Lagunera, que de Lerdo a Torreón disfrutaron de la más bella de las fiestas, la fiesta brava.
En primera instancia, lo ocurrido el sábado 11 de noviembre, durante la corrida mano a mano entre los noveles matadores Aldo Orozco y Antonio García el “Chihuahua”, en la denominada Plaza del Romance “Salvador Barrera” de la Ciudad Jardín en Lerdo, Durango.
Lo destacado resultó ser la presentación, por vez primera en esta plaza, de los jóvenes toreros doctorados Aldo Orozco (hace tres años) y Antonio García (apenas hace tres meses). Entre los dos sumaron tres orejas, resultando triunfador el primero, tras cortarle dos apéndices al segundo de su lote, mientras que el “Chihuahua” no se dejó pisar la sombra y logró una oreja, como único trofeo, del novillo que cerró el festejo.
Lo lamentable fue la pobre entrada que se registró, pues muy pocos aficionados acudieron al tendido de sombra, el cual no llegaba ni a la mitad de su capacidad, y en sol el hueco fue simplemente enorme. El festejo inició media hora después de lo acordado, seguramente con la intención de que la afición registrara una mejor entrada, lo cual nunca ocurrió. Ante tal recibimiento, durante el paseíllo se percibió a los alternantes poco motivados, sin embargo, a la hora de la lidia se dedicaron a lo suyo, obteniendo el resultado anteriormente mencionado.
Otra cosa que habrá que señalar son las características anunciadas del ganado de “El Vergel”, el cual si no eran chicos, a simple vista se encontraban por debajo del peso anunciado, situación que no fue del agrado, manifestado por parte de la escasa afición en el tendido.
La otra cara de la moneda se presentó en la Plaza de Toros Torreón, con muy aceptable entrada durante el primer cartel del “Serial Novilleril Internacional de la Raza”. La fortuna favoreció a Aarón Hinojosa el “Profeta”, quien después de una noche triste regresó y toreó con valor, alegría y sentimiento, cubriendo por completo los tres tercios. Haciendo salir a los duendes en el ruedo y con su magia pudo arrancar un apéndice al novillo “Aquí Estoy”, resultando así el máximo y único triunfador de la tarde inaugural, además logró que la afición en el tendido se le entregara en repetidas ocasiones con cerradas ovaciones y palmas al son de la banda que entonaba Torreón, Torreón.
A quienes el santo les quedó de espalda fue a los noveles espadas Labastida y Campuzano, quienes cargaron con los huesos del encierro. Por su parte, Núñez se mostró muy torero, pero le pesó demasiado el paquete que el “Profeta” le dejó con su antecedida participación, calentándole el ambiente. Su faena declinó aunque propinó buena estocada, a pesar de ello el insensible juez de plaza aplicó su criterio personal y diferente, negándole el apéndice.
Lo referente a la fiesta dejó buen sabor, lo que confundió y disgustó a la afición fue lo anunciado por la empresa al regalar la entrada a los niños y las damas, pero la sorpresa fue al llegar a la Plaza cuando al intentar ingresar fueron detenidos pues debían ingresar acompañados de un adulto que comprara boleto en taquilla; otra cosa que causó malestar fue que los aficionados boleto en mano esperaron y esperaron bajo los candentes rayos del sol para ingresar a la plaza. Estos aspectos, entre otros, se deberán de afinar pues las promociones continúan para el segundo cartel, programado para el próximo 26, en el cual se espera queden claras las condiciones de la empresa y los aficionados que deseen asistir al festejo puedan así disfrutar de la más bella de las fiestas, la fiesta brava.
