En avanzado estado de putrefacción fue localizado la tarde de ayer en las inmediaciones del ejido Monterreycillo el cuerpo de un policía preventivo de Ciudad Lerdo, quien se encontraba desaparecido desde el pasado 26 de marzo.
A los pies del cadáver fueron localizados casquillos percutidos de arma de fuego.
El Ministerio Público señaló que el cuerpo se encontraba junto a un arroyo que corre paralelo a las instalaciones del Observatorio del Nazas.
A pesar del estado de descomposición del cuerpo, se pudo observar que presentaba cinco disparos de arma de fuego. Junto a los restos también se localizaron gran cantidad de casquillos de arma de fuego percutidos. Los restos fueron trasladados al anfiteatro del Servicio Médico Forense para la necropsia
de Ley.
Un tatuaje en el brazo izquierdo y una denuncia por desaparición de un Policía de Lerdo, fue la información para que el agente del Ministerio Público identificara el cuerpo de Mario Hernández Moreno.
Por el observatorio
Ayer alrededor de las 6:00 de la tarde Aurelio Urbina, agente del Ministerio Público, se trasladó al ejido Monterreycito, en Lerdo, ya que le habían reportado una persona sin vida a lado del río. Dos unidades de la Policía Municipal de Gómez y Lerdo también atendieron el llamado, así como una unidad de la Policía Federal Preventiva.
Al sur del ejido rumbo al Observatorio se encontró sin vida que sólo tenía un pantalón de mezclilla y tenis. Algunos elementos de la Policía de Lerdo, al ver un tatuaje de calavera en el brazo izquierdo del difunto se dieron cuenta que se trataba de su compañero.
Con arma de fuego
Mientras elementos del Ministerio Público buscaban evidencia en los alrededores del cuerpo, encontraron 7 casquillos de un arma de fuego calibre .45. Después de la necropsia confirmaron que Mario Hernández falleció por una hemorragia en el cerebro producida por varios disparos de un arma.
Los familiares reconocieron al cuerpo sin vida.
