Jugadores de los desaparecidos equipos Laguna y Torreón, que hoy serán homenajeados por la directiva del Santos Laguna, previo al encuentro entre los Guerreros y el Atlante. (Fotografías de Jesús Galindo López)
La coronación del Laguna, tuvo lugar el domingo 18 de febrero en el Estadio San Isidro.
El futbol de Primera División llegó a la Comarca Lagunera el domingo 18 de febrero de 1968, hace 40 años, con la coronación del desaparecido equipo Laguna como campeón de la temporada 1967-1968 de Segunda División, que ocho días antes, el 11 del mismo mes y año, había amarrado el ascenso al vencer a Zacatepec 1-0 en el Estadio Agustín “Coruco” Díaz en un partido histórico.
La coronación de la Ola Verde, como también se llamaba al equipo Laguna, tuvo lugar el domingo 18 de febrero en el Estadio San Isidro al golear al equipo Zamora por cinco tantos a cero en un ambiente de fiesta y con una afición lagunera jubilosa, que disfrutó a lo grande el ascenso de su primer equipo, pues al año siguiente el Torreón lo lograría también.
Los forjadores de esa primera hazaña fueron Rubén Villalpando, guardameta, Mario “Macho” Cordero (QEPD), Ramón “Mon” Romero (capitán del equipo), Pedro Salinas y Celedonio Mora, defensas; Bulmaro Garcidueñas y Rodolfo “Rudy” Álvarez, medio volantes; Refugio “Coyota” Fernández, Gerardo “Pantalones” Lupercio, Raúl “Acapulco” Herrera y Joaquín “Pato” Villarreal, delanteros.
En ese entonces Laguna jugaba el 4-2-4 bajo la dirección técnica del argentino Juan Ángel “Pito” Pérez.
La mayoría de estos jugadores aún viven en la Comarca y su hazaña está vigente entre los aficionados al futbol, por ello el Club Santos Laguna rendirá un homenaje a jugadores del Laguna y del Torreón, por haber hecho posible la llegada de la Primera División a la Comarca.
Previo al partido de hoy entre Santos Laguna y Atlante serán homenajeados Pedro Salinas, Raúl “Acapulco” Herrera, Ramón “Mon” Romero, Celedonio Mora, Emilio “Chero” Aldrete y Joaquín “Pato” Villarreal del Laguna; por parte del Torreón recibirán un reconocimiento Elías “Chuleta” Aguilar, José “Caica” Zamora, Luis “Chubi” Echeverría, Francisco Javier “Capi” Lima y el guardameta Salvador Kuri.
LOS PROTAGONISTAS A ESCENA
Ramón “Mon” Romero, el capitán de la Ola Verde, consideró que la afición es la que merece el mérito de que la Comarca en el pasado contara con dos equipos de Primera División, el Laguna y el Torreón, y ahora con el Santos Laguna, pues es una afición muy noble, entregada y exigente.
Reconoció que el ascenso del Laguna al máximo circuito del futbol mexicano hace 40 años fue un sacrificio económico enorme para la directiva de ese entonces. Además, fue difícil, pues había equipos muy competitivos, como el Zacatepec, al que derrotaron en su propia casa, en donde tenía cuatro años y medio sin perder.
“La Ola Verde era un equipo muy unido, comprometido con la afición, y a base de enjundia logramos el ascenso a Primera División. Hicimos una gran campaña al mando de Don Juan Ángel ‘Pito’ Pérez, y fruto de ella fue el campeonato obtenido el 18 de febrero de 1968”, recordó “Mon” Romero.
UN LATERAL DE GARRA
Celedonio Mora llegó procedente del equipo Monterrey a la Ola Verde en 1965, en donde encontró a un conjunto de buenos jugadores, y aunque tardó un poco en adaptarse al mismo, logró formar parte del equipo que venció a un Zacatepec que era invencible en el Estadio Agustín “Coruco” Díaz.
“Se logró ganarle a Zacatepec porque los integrantes de la Ola Verde teníamos muchas ganas de triunfar, y sobre todo la afición, que viajó hasta la Selva Cañera en autobús y en tren para apoyarnos de manera incondicional”, recordó Celedonio Mora. Reconoció que el día del juego la presencia de Don Gilberto Martínez, integrante de la directiva del Laguna, fue un gran aliciente, pues les dio mucha confianza en un partido trascendental.
EL RELEVO DE ORO
Emilio “Chero” Aldrete, originario de Guadalajara, en donde jugó en varios equipos de futbol amateur, fue un jugador importante en el Laguna como el cambio oportuno que necesitaba hacer el técnico dentro de la contienda.
“Fue en la desaparecida Ola Verde en donde jugué la mayor parte de mi carrera profesional, desde que llegué a este equipo radico en la Comarca, aquí me casé y aquí vivo muy contento con mi familia”, comentó.
EL BALUARTE
Pedro Salinas, uno de los jugadores claves del Laguna en el ascenso y campeonato conseguido el 18 de febrero de 1968, dijo sentirse muy orgulloso y satisfecho de haber participado en esta conquista, pues han pasado muchos años y los viejos aficionados lo saludan con aprecio cuando se lo encuentran en la calle.
“Una de las cosas que más me satisface es que el equipo Laguna haya sido el primero en ascender a Primera División, con un gran esfuerzo en todos los sentidos, pues en aquellos tiempos los equipos no contaban con grandes patrocinios como ahora, y en el caso de la Ola Verde era sostenido por un grupo de empresarios, quienes se la jugaron con el equipo”, puntualizó.
“Teníamos un grupo fuerte, futbolísticamente no había problemas pues contábamos con un buen entrenador en la persona de Don Juan Ángel “Pito” Pérez, que nos supo dirigir atinadamente”.
“No hubo necesidad de comprar una franquicia, llegamos a Primera División con todas las de la ley, porque le ganamos a Zacatepec en un partido histórico”, precisó Pedro Salinas.
UN JUGADOR DE CLASE
Raúl “Acapulco” Herrera consideró que el futbol hoy en día se ha comercializado mucho y la mayoría de los clubes de Primera División no han puesto interés en las fuerzas básicas. En el futbol actual hay carencia de jugadores técnicos, sólo puros correlones, ya que se ha descuidado el aspecto de la técnica individual.
“Anteriormente en el futbol debían cumplirse ciertos requisitos, que eran saber los fundamentos del futbol, como parar una pelota, saber pasar y correrla bien. El jugador de antes tenía más cualidades, ahora nada más con que sepan encimar o estorbar, y con eso se conforman los técnicos”. Y apuntó: Ya no hay futbolistas, como dice Don Ignacio Tréllez, que hagan “jugadas de sexto año”.
Recordó que la hazaña del ascenso logrado hace 40 años la vivieron intensamente, ya que era un campeonato muy largo, con viajes extenuantes. Viajaban en autobuses de trompa, sin asientos reclinables, sin calefacción, y tenían que llevar sarapes o cobijas en tiempo de frío.
LA GRAN PROMESA
Joaquín “Pato” Villarreal fue el jugador más joven del equipo que logró el ascenso, a los 17 años de edad era titular indiscutible, junto con Ramón “Mon” Romero.
Joaquín contó que a los 15 años de edad era “aguador” del equipo Laguna, y poco a poco, con la ayuda de su compadre Ricardo “Matracón” Luna, llegó al primer equipo de la Ola Verde.
“El día del partido contra Zacatepec jugué infiltrado, ya que estaba lesionado de los tobillos, pero no quería perderme ese partido, pues si ganábamos el ascenso estaba seguro, y contra Zamora nada más nos coronaríamos campeones, como así sucedió”, contó el “Pato” Villarreal.
Con tristeza recordó aquel 21 de marzo de 1971 cuando Claudio Lostanau le filtró un pase en diagonal contra el Atlante en el Estadio Azteca y no se dio cuenta que el guardameta Rafael Puente salió por el balón y chocó con él y un defensa, resultando con fractura expuesta de tibia y peroné.
“En ese tiempo la ciencia no estaba tan avanzada y fui operado en siete ocasiones, sin que pudiera recuperarme, por ello me retiré de la actividad profesional, pero todavía vivo del futbol, ahora como entrenador, pues es la pasión de mi vida”, concluyó “El Pato” Villarreal.
