Los trabajadores del área de caminos estuvieron acompañados por sus familias, durante la noche de celebración decembrina. (EL SIGLO DE TORREÓN)
El grupo de “trenistas de caminos” de la sección 29 del Sindicato de Trabajadores Ferrocarrileros de la República Mexicana (STFRM) que mantiene un plantón frente al Palacio de Gobierno Municipal de Ciudad Frontera, pasó la Nochebuena y la Navidad en la plancha de la plaza de armas, manteniendo la protesta contra su secretario general local, Rodolfo Chairez Frausto.
Los trabajadores del área de caminos estuvieron acompañados por sus familias, durante la noche de celebración decembrina.
Desde el inicio de la manifestación, el miércoles, el dirigente nacional Víctor Flores Morales se ha mantenido al margen de la situación y la Secretaría de Trabajo tampoco ha intervenido.
El secretario general local de la sección 29 del STFRM es señalado por los manifestantes como un líder corrupto que vendió más de 90 plazas para nuevos trabajadores a 100 mil pesos cada una.
La empresa Ferromex despidió a varios trabajadores que denunciaron en esa protesta en la Estación Monclova los presuntos actos de corrupción del dirigente sindical y las violaciones en sus convenios laborales.
Los trabajadores del plantón tienen seis meses sin recibir su salario y al reclamar, Chairez Frausto tomó represalias contra los inconformes al ordenar que fueran separados de sus cargos laborales.
El polémico secretario general local se ha visto envuelto en acusaciones de corrupción y de presuntamente atender los intereses de la empresa, por encima de los derechos de los trabajadores.
Ferromex es propiedad de la familia Mota Larrea, la misma dueña de la mina Pasta de Conchos, donde una explosión mató a 65 mineros el 19 de febrero de 2006.
