Luego de un año de espera la Parroquia de Guadalupe en Torreón recibió de nueva cuenta a los fieles para celebrar a la Virgen de Guadalupe, esto en el 490 aniversario de su aparición en el Tepeyac.
En medio de estrictas medidas sanitarias para evitar el COVID-19, con aforos controlados y con una pantalla en el exterior del templo, fue como se realizó la llamada "misa de gallo" a cargo del obispo de Torreón, Luis Martín Barraza, quien en su mensaje destacó el ánimo de entrega y fe de la Virgen María.
Menos de 100 personas presenciaron la celebración religiosa dentro del templo, todos con cubrebocas, con pocas bancas y con distancia entre sí. De igual forma se llevó a cabo la entonación de las tradicionales mañanitas, mismas que este año y para evitar mayores aglomeraciones fue solamente con sonido local, no con mariachis o grupos de banda como en anteriores ocasiones.
A las afueras de la parroquia se permitió también la venta de alimentos y otros productos religiosos, todos los puestos con distancia y sin la presencia de juegos mecánicos, verbena popular controlada y con reservas, esto ante la pandemia que siguió también en este 2021. Autoridades municipales no reportaron mayores incidencias en la jornada previa a este 12 de diciembre, día en el que se mantendrá la vigilancia en el templo y en la ciudad en general.
Menos de 100 personas presenciaron la celebración religiosa dentro del templo, todos con cubrebocas, con pocas bancas y con distancia entre sí.