El pasado lunes por la noche, los Patriotas fueron a la casa de los Bills y demostraron que, hasta ese momento, son ahora el mejor equipo de la AFC al llegar a siete victorias de manera consecutiva pero lo malo para la escuadra de Nueva Inglaterra es que hoy, al inicio de la semana 14 cuando los Acereros visiten a los Vikingos, el conjunto de Bill Belichick, tendrá un descanso y no sabemos si, en algún momento dado, eso les vaya a perjudicar.
Uno de los clásicos de mayor tradición es el de Green Bay contra Chicago, y se verán las caras el domingo por la noche en la casa de los Empacadores, donde Aaron Jones regresó a la actividad en la semana 12 en contra de los Carneros después de perderse siete días por una lesión en la rodilla pero el corredor de segundo año A.J. Dillon demostró que está para entrar en una situación de emergencia dejando en el aire si la escuadra de Wisconsin sacó sabiamente a su corredor estrella o el egresado de Boston College ha enseñado lo necesario como para hacerse con un tiempo compartido con el graduado de la Universidad de Texas en El Paso.
Y sin duda que, el mejor partido de la semana, volvió a caer en lunes, cuando los Carneros en una aventura muy complicada, visiten el desierto para enfrentarse a los Cardenales y, donde el problema para Los Ángeles, es que Kyler Murray regresó a la acción el domingo pasado y parecía la amenaza total para las defensas que era antes de que una lesión en el tobillo lo dejara en el hule ya que lanzó dos pases de touchdown y corrió para dos más en una victoria aplastante sobre los Osos, sin mostrar limitaciones en la movilidad y la otra mala para la gente de Sean McVay, es que DeAndre Hopkins también regresó a la alineación después de una ausencia prolongada, y si los pájaros sacan la victoria, los pondría en el asiento del conductor tanto por el título de la NFC Oeste como por el sembrado número uno en la NFC.
El domingo por la tarde en la bahía de la Florida, los Bills estarán visitando a los Bucaneros donde parece el punto más adecuado para Brady en ser el favorito al “más valioso” ya que después de la victoria tan cómoda en contra de Atlanta, la escuadra de Tampa se colocó a un paso más cerca de un inevitable título de la división sur en la Conferencia Nacional ya que tienen una ventaja muy adecuada de cuatro juegos a todos los de ese sector como son los mismos Falcons, las Panteras y los Santos.
Y la verdad es que aún sigo sin entender lo que sucedió el pasado domingo en Detroit, donde la escuadra de los Leones obtuvo su primera victoria de la temporada en contra de los Vikingos ya sobre el tiempo y sin ser tan drástico en la forma como celebraron al final del encuentro, lo que pienso y sin afán de ofender las susceptibilidades de los aficionados de la escuadra de Michigan, deberían de pensar de cómo salir de la mediocridad a la que tienen acostumbrados a la liga y hasta me he puesto a pensar de que, cuando vayan por primera vez a un Súper Tazón, éstos los estarán viendo tal vez, los tataranietos de Barry Sanders.
