Cultura

Museo Arocena

Obra del siglo XIX llega a la Colección Arocena

Se trata de un retrato de una monja de la Orden de la Inmaculada Concepción

Se trata de un retrato de una monja de la Orden de la Inmaculada Concepción. (SAÚL RODRÍGUEZ)

Se trata de un retrato de una monja de la Orden de la Inmaculada Concepción. (SAÚL RODRÍGUEZ)

SAÚL RODRÍGUEZ

Gracias al apoyo del grupo de Amigas del Museo Arocena (quienes se unieron al Programa Conserva), la obra Sor María Agustina de la Santísima Trinidad, fechada en 1800 y realizada en Ciudad de México por un autor desconocido, ha sido restaurada e incluida en la Colección Arocena.

En entrevista, Marcela Zapiain, encargada del área de Catalogación y Conservación del Museo Arocena, comentó que la obra (actualmente mostrada en el vestíbulo del antiguo Casino de La Laguna) llegó hace aproximadamente dos años e ingresó sin bastidor. Es decir, además de no tener marco, tampoco contaba con el soporte de la tela.

“No sabemos muy bien cómo fue adquirida, pero lo que sí sabemos es que venía un poco deteriorada, que seguramente le quitaron el bastidor porque tenía ataque de insectos y esto no convenía a la pieza de ninguna manera. Lo que se atendió primero fueron los aspectos de conocimiento de la pieza”.

Se trata de un retrato de una monja de la Orden de la Inmaculada Concepción, inmortalizada en su ceremonia de profesión. Es también una despedida de su familia, pues la monja llevará una vida entregada a Dios dentro de las paredes del convento. Zapiain recalca que este tipo de retratos estaban hechos para las familias de las monjas.

“Anterior a esta fecha (1800), en algunas órdenes religiosas, estos cuadros eran muy elaborados. Incluso en esta orden, esta monja es concepcionista y lo que se solía hacer era los retratos de monjas coronadas: estas monjas con coronas de flores muy elaboradas, acompañadas a veces de una vela o un niño Dios en la mano. Aunque este pertenece a esa familia de cuadros, ella no porta corona porque es probable que en ese momento hayan pasado de moda, pero está elegantemente vestida, tiene su capa, trae su escudo, cuyo tipo es frecuente en dos tipos de órdenes: las jerónimas (como Sor Juana Inés de la Cruz) y las concepcionistas (que este es el caso)”.

Se sabe la identidad de la monja gracias a una cartela en la parte inferior de la obra. Sor María Agustina provenía de una familia importante dedicada a la producción de pulque y se indica que tomó el hábito el 23 de mayo de 1799, en el convento de San Bernardo de Ciudad de México, a los 22 años y profesó en el mismo convento el 13 de junio de 1800.

“También sabemos, gracias a la restauración, cuando empezó la limpieza, descubrimos que la obra había sido modificada en algún momento próximo a la primera captura. Digamos que se hizo en dos etapas. Y estas dos etapas hicieron que el formato del cuadro creciera un poco hacia abajo y hacia los lados”.

Toda obra es una ventana a la época donde fue realizada. Dar lectura pictórica a este óleo sobre tela permite conocer cómo las mujeres que entraban al mundo conventual se despedían, en gran medida, de su participación social.

Entre otros aspectos, el cuadro también registra un ‘pentimento’, es decir, un arrepentimiento del pintor, un aspecto que ha sido oculto. En este caso, se puede apreciar el relieve de las cuentas de un rosario en las manos de la monja.

Es muy probable que el pintor hizo una primera versión donde se veía un rosario en las manos o sobre el hábito de la chica. Por alguna razón lo cubrió, no sabemos si es porque al pintor no le gustó, o si tampoco le gustó a la familia de la nodriza”.

Otro aspecto interesante es que el escudo es una declaración de la identidad de la monja, de su familia, del lugar donde profesa y de sus devociones. Por tal motivo, el pintor plasmó allí a la Santísima Trinidad, a la Virgen de la Concepción, a la Virgen María, San Agustín, Antonio de Padua, Gertrudis la Magna, San Bernardo y otros personajes que seguramente pertenecían a su devoción. Además, el libro en sus manos indica que la monja era una mujer que sabía leer.

Por el momento, la obra seguirá exhibida durante algunos meses en el vestíbulo del Casino.

Leer más de Cultura

Escrito en: Museo Arocena arocena

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Cultura

TE PUEDE INTERESAR

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Se trata de un retrato de una monja de la Orden de la Inmaculada Concepción. (SAÚL RODRÍGUEZ)

Clasificados

ID: 2037459

YouTube Facebook Twitter Instagram TikTok

elsiglo.mx