Por un accidente, un joven lagunero incursionó en la joyería sin saber que se volvería su gran pasión.
Se trata de Gustavo López, quien ha destacado en tal actividad gracias a sus joyas con historias, algo de lo que habló con El Siglo de Torreón, dentro del programa Historias de Laguneros.
López nos recibió en su taller que se encuentra en su hogar. Ahí ha dado vida a decenas de piezas que hoy en día portan con orgullo sus paisanos y hasta personas de otros sitios de la República Mexicana.
Pero, ¿qué detonó este amor por la joyería? Fue lo primero que contó: “Todo esto nació por un accidente. Yo quería hacerme una cadena porque veía la cadena que usan los reguetoneros y quería algo parecido.
“Mi mamá me llevó a un taller de la avenida Bravo casi esquina con Águila Nacional y ahí me hicieron mi cadena; luego, el dueño del taller, Jaime Maldonado, me invita a que realice un brazalete para que aprendiera a darle un mayor valor a las cosas, sin saber que me iba a fascinar este mundo".
En ese sentido, Gustavo contó que su familia, al conocer sus deseos de dedicarse a lo mencionado y que hoy en día le da de comer, de inmediato decidió apoyarlo.
“Vivo, respiro, como y duermo joyería y lo mejor es que mis seres queridos me han ayudado y apoyado en cualquier locura que se me ocurre”.
El entrevistado explicó que elabora piezas de oro y plata con precios variados, ahora sí que para todos los bolsillos.
“Manejo oro blanco, amarillo y rosa de 14 quilates para arriba y plata 925. Hay técnicas muy diferentes que nos permiten sacarle mejor provecho al metal y al diseño”.
Gustavo mencionó que él crea joyas a través de historias personales, técnica que de igual manera lo ha llevado a destacar.
“Un empresario me platicó un relato de altibajos. Contó una historia de superación, de vencer las drogas, de problemas económicos y a partir de eso generé un brazalete al que llamé Cicatrices, con técnica de cincelado que forman cicatrices tal cual e incrustaciones de cinco piedras".
Una particularidad que tienen mis trabajos es que son sorpresa, es decir, la persona no ve nada hasta que le entrego la joya”, resaltó.
El joven mencionó que dedica bastantes horas al día a la joyería, actividad que también implica riesgos por lo que siempre hay que tener cuidado.
Informó que en la Comarca Lagunera ya hay bastantes personas dedicadas a la elaboración de joyas. Eso le da bastante gusto. En redes dijo que se encuentra en Instagram como: @gustavolopezjoyero

(FOTO: RAMÓN SOTOMAYOR)