
ESPECIAL
La licuadora es un electrodoméstico que usamos para elaborar diferentes platillos y bebidas; por ello varios alimentos quedan adheridos a las aspas, paredes y tapa de la licuadora que con un simple enjuague no se pueden quitar.
¿Qué consecuencias puede tener una licuadora mal lavada para la salud?
Además de los olores y sabores desagradables que se acumulan por los restos de comida, el deterioro de la licuadora y una posible atracción de plagas; una licuadora sucia puede tener estos efectos en la salud:
- Desarrollo de bacterias y hongos: Los residuos de comida se convierten en caldo de cultivo, albergando bacterias como E. coli, Salmonella y hongos.
Entonces, ¿Cómo se debe de lavar?
Para limpiar tu licuadora de forma efectiva, necesitas los siguientes materiales:
- Lavatrastes líquido
- Medio limón fresco
- Agua caliente
- Trapo de limpieza
- Esponja
- Bicarbonato de sodio
- Cepillo pequeño
Ya teniendo los ingredientes listos, puedes empezar con el proceso de limpieza, que se debe realizar al menos una vez cada dos semanas para garantizar que tu licuadora funcione correctamente y no acumule bacterias ni malos olores.
El primer paso es desarmar todas las piezas desmontables de la licuadora. Dependiendo del modelo, las partes pueden ser separadas con facilidad, mientras que en otros casos puede ser más complicado debido a la suciedad acumulada. Si es difícil separar las piezas, calienta un poco de agua para que sea más fácil aflojar los restos que queden pegados.
Una vez separadas las piezas, procederemos a lavarlas con agua tibia y jabón para trastes, aunque dependiendo del estado de la licuadora, podríamos añadir un poco de vinagre, bicarbonato o incluso un toque de cloro para una limpieza más profunda. Presta especial atención a la rosca del vaso y la base, así como a las cuchillas, asegurándote de limpiar debajo de ellas, ya que ahí es donde más residuos se acumulan. Si la suciedad está muy pegada, puedes dejar las piezas remojando por unos minutos para que sea más fácil de quitar.
Si no deseas desmontar el vaso por completo, o si no consideras que sea necesario, puedes optar por llenar el vaso con agua caliente y añadir unas gotas de detergente para trastes o un poco de bicarbonato. Para eliminar malos olores, agrega medio limón con todo y cáscara. Luego, pon en funcionamiento la licuadora durante 30 segundos o hasta que los restos de comida se desprendan. Deja reposar la mezcla durante 5 a 10 minutos y luego desecha el líquido. Si es necesario, repite este proceso.
Una vez que todas las piezas estén limpias, vacía el vaso y límpialo como de costumbre con una esponja y agua tibia. Si el vaso es apto para lavavajillas, puedes meterlo allí para un lavado más exhaustivo. Es importante recordar que, después de limpiar todas las piezas, debes dejar que se sequen completamente antes de volver a armar la licuadora, para evitar la acumulación de humedad y el crecimiento de moho.