Sufre exportación ganadera su peor crisis: Jericó Abramo
La exportación de becerros desde Coahuila hacia Estados Unidos atraviesa una de sus peores crisis en años, con una caída del 90% durante 2025, alertó el diputado federal Jericó Abramo Masso.
La situación se deriva del cierre de la frontera comercial tras la detección de gusano barrenador en estados del sur del país, una plaga que mantiene la preocupación en el mercado internacional.
De exportar hasta 60 mil cabezas anuales, este año apenas se han vendido 5 mil, lo que ha frenado casi por completo una de las actividades agropecuarias más relevantes para el estado. Las consecuencias económicas son severas, pues se estiman pérdidas por más de 55 mil millones de pesos, según advirtió el legislador.
“Un becerro de 200 kilos alcanza un valor de hasta dos mil dólares si cruza a tiempo a Estados Unidos. Pero si se retrasa la exportación, su precio se reduce a la mitad en el mercado nacional, y eso representa un golpe duro para los productores”, explicó Abramo Masso.
Por otra parte, el legislador dijo que durante una reunión con asociaciones ganaderas de Coahuila, el diputado detalló que al menos 2 mil becerros ya están listos para su envío, debidamente identificados con los aretes oficiales y el registro correspondiente ante el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica). Sin embargo, el cierre persiste, y los animales permanecen varados.
Aunque el foco del brote se localiza en el sur del país, las restricciones han sido generalizadas, afectando incluso a estados como Coahuila, donde los ganaderos cumplen con rigurosos estándares sanitarios.
“Esta falta de acuerdos binacionales genera incertidumbre y pone en riesgo la sustentabilidad de una cadena productiva clave para el norte del país”, subrayó el legislador.
Para hacer frente a esta situación, Jericó Abramo impulsa un exhorto formal al Gobierno Federal, solicitando iniciar negociaciones inmediatas con autoridades estadounidenses para restablecer el comercio ganadero.
“Necesitamos voluntad política, coordinación institucional y un diálogo franco, sin politiquería. Es momento de actuar con seriedad ante una situación que ya afecta miles de empleos y economías locales”, concluyó Abramo Masso.
