
SEDU invierte 18 mdp en obras de La Escuela es Nuestra
La Secretaría de Educación de Coahuila (SEDU) invirtió 18 millones de pesos durante el ciclo escolar recién terminado para corregir daños en escuelas ocasionados por construcciones mal ejecutadas dentro del programa federal La Escuela es Nuestra, informó Emmanuel Garza Fishburn, titular de la dependencia.
Garza Fishburn detalló que los planteles afectados, ubicados principalmente en las regiones Laguna y Sureste del estado, presentaron derrumbes de bardas y techumbres, así como problemas con la infraestructura eléctrica, debido a la instalación de sistemas de aire acondicionado sin el respaldo técnico necesario.
“El problema surge cuando los padres de familia deciden hacer obras por su cuenta sin consultar con el Estado. Hemos detectado construcciones que se desplomaron o tuvieron que ser demolidas porque ponían en riesgo la seguridad de los estudiantes”, explicó el funcionario.
Además de los derrumbes, las inspecciones revelaron obras inconclusas en sistemas sanitarios e hidráulicos, conexiones eléctricas mal hechas o inexistentes, y equipos que quedaron inservibles por falta de condiciones adecuadas para su instalación.
Ante este panorama, el secretario hizo un llamado a las comunidades escolares a canalizar los recursos hacia prioridades reales que impacten la seguridad y funcionalidad de los planteles: “La inversión debe enfocarse en lo urgente, como mejorar las instalaciones eléctricas, reparar goteras, impermeabilizar techos y garantizar servicios sanitarios adecuados”, subrayó.
Garza Fishburn insistió en que cualquier intervención de infraestructura con fondos federales debe ser revisada por las áreas técnicas de SEDU y del Instituto Constructor de Infraestructura Física Educativa y Deportiva (Icifed).
“No se trata de frenar las mejoras, sino de asegurar que lo que se construya sea útil, seguro y duradero. Queremos evitar que el dinero termine en obras que deban demolerse meses después”, puntualizó.
Por último, el Secretario informó que se ha establecido un canal de comunicación constante con el delegado federal del Bienestar y con el equipo operativo del programa La Escuela es Nuestra, con el objetivo de alinear criterios técnicos y garantizar que las futuras intervenciones cumplan con los estándares normativos que exige la infraestructura educativa en el estado.