
Personaje. Uriel (Santiago Sandoval) es un joven migrante de 23 años que, como muchos otros, decide ir tras el sueño americano y viajar hacia el norte en busca de una mejor vida.
Fue el propio director lagunero Pato Rivera quien le dio la noticia: 'Un lugar en tierra prometida', el cortometraje que el actor Santiago Sandoval protagonizó al filmar en locaciones de Viesca, fue seleccionado en el Short Film Corner del Festival Internacional de Cine de Cannes, evento magno del séptimo arte internacional que se realizará del 13 al 24 de mayo próximos en la Riviera Francesa.
"Estoy muy feliz. Creo que es una oportunidad muy grande, porque estar seleccionado en un festival siempre es importante; se hacen muchas alianzas, colaboraciones".
Nacido hace 23 años en Guadalajara, Sandoval nunca pensó en ser actor. Estudió para piloto en la Fuerza Aérea Mexicana y al salir se encontró con el casting de Heroico (David Zonana, 2023). Entonces decidió audicionar y se quedó contra todo pronóstico. Más tarde recibió entrenamiento actoral por parte de la maestra Mónica del Carmen. Su papel en esa cruda cinta lo nominó en 2024 al Premio Ariel como Mejor Actor Revelación.
"Es como un momento de crecimiento. Una nominación es importante, es algo relevante, pero no te abre puertas ni nada, sólo es que tú sigas luchando por eso. Obviamente, te da un renombre, cierta credibilidad y aceptación en la industria".
El actor se encuentra en Torreón, donde realiza una gira de medios para promocionar la proyección en Cannes de 'Un lugar en tierra prometida', donde interpreta a Uriel, un joven migrante mexicano. Indica que es la primera vez que un trabajo suyo será visto en ese festival, que el productor Carlos Bracho fue quien lo contactó a petición del director Pato Rivera. Se buscaba un perfil natural, que no cayera en los típicos estereotipos sobre los migrantes.
La sinopsis del cortometraje muestra a Uriel, un migrante de 23 años que decide cruzar ilegalmente la frontera para buscar una mejor vida. En el viaje conoce a Rafael (Jesús Murillo), un anciano que busca el mismo sueño americano y con quien entabla una relación de amistad y empatía.
Santiago se considera un actor de método. Trata de investigar, de empaparse de lo que vive el personaje y luego emplea esa información para encarnarlo. Por eso aprovechó una visita que tuvo a Ciudad Juárez, Chihuahua, y se relacionó con migrantes reales, recogió sus testimonios y luego los compaginó con lo escrito en el guion.
"Interpretar a Uriel fue complicado. Fue mucha lectura de guion junto con Pato (el director). Pato me recomendó películas y yo las veía. Y una semana antes de grabar el cortometraje di una master class en una escuela de actuación de Ciudad Juárez. Entonces, aprovechando que estaba allá, en una ciudad con alto índice de migrantes, les dije que si me podían llevar a casas de migrantes y lo hicieron".
Uriel le exigió a Santiago una interpretación muy física, pues gran parte del cortometraje se filmó durante agosto de 2024 en el municipio de Viesca, en medio del desierto y el calor sofocante. Entonces decidió utilizar esas condiciones a su favor, pues debía reflejar el cansancio del personaje, su desesperación, su daño emocional, pero también su capacidad de empatía.
"El mensaje es una amalgama de todos los personajes, de toda la historia: hay que tener empatía con estas personas. Creo que ya conocemos a los migrantes y sus historias, pero esta no sólo refleja lo que siempre sabemos, lo que Hollywood y las películas nos dan de los migrantes, de que pasan y a ver si llegan o los agarra la migra. Creo que este cortometraje va más allá; es una parte más espiritual, conceptual de lo que es un migrante".