
Peñoles es pionera en el uso de agua tratada
Industrias Peñoles se destaca como un referente en México y América Latina, siendo pionera en el uso de agua tratada en la industria.
“Nuestra empresa no solo cumple con las regulaciones ambientales, sino que va más allá, estableciendo un estándar para el uso responsable del agua en el sector. Estamos convencidos de que el desarrollo industrial y la sostenibilidad hídrica pueden ir de la mano, asegurando un uso eficiente y la protección al medio ambiente”, menciona Rafael Rebollar, director general de Industrias Peñoles.
Peñoles ha sido una de las primeras empresas en América Latina en adoptar el uso de agua tratada para sus procesos industriales, práctica implementada desde los años 70 que consiste en reutilizar el agua que ya fue usada por la comunidad en el servicio doméstico.
En sus operaciones mineras, la empresa ha implementado un sistema de recirculación de agua a través de circuitos cerrados. Esto significa que el líquido se reutiliza continuamente dentro de las mismas operaciones, enfoque que lleva a la reducción del consumo hídrico, reponiendo solo aquel que se pierde por evaporación.
Un caso particularmente notable es el de las plantas de Peñoles en Torreón, Coahuila. En esta región la empresa utiliza exclusivamente agua negra tratada para sus operaciones industriales. Esta iniciativa no solo reduce la demanda de agua potable, sino que también transforma un desecho en un recurso valioso, demostrando cómo la colaboración entre la industria y los sistemas de tratamiento de agua municipales puede generar beneficios ambientales significativos.
De acuerdo con información de la Cámara Minera de México (CAMIMEX), la minería en nuestro país representa aproximadamente el 1.4% del consumo nacional de agua. En contraste, la agricultura utiliza alrededor del 76%, y el sector público urbano alrededor del 14%.
Peñoles sabe que la minería puede ser una actividad que use el agua de manera responsable. La recirculación y el uso de agua tratada son prácticas que contribuyen a que este porcentaje sea significativamente menor de lo que muchos podrían imaginar, y se trabaje continuamente para reducirlo aún más.