El clavadista mexicano se alzó en lo más alto del podio tras consagrarse en el trampolín de tres metros en el Mundial de Singapur.
Finalmente, lo logró. Luego de años de entrenamiento junto a su inseparable entrenadora Ma Jin, Osmar Olvera ha podido vencer a los chinos, la gran potencia en los clavados.
Olvera, quien ya ha colocado su nombre en la historia de su disciplina al convertirse en el rostro del deporte mexicano, alcanzó lo que parecía imposible en el Campeonato Mundial de Deportes Acuáticos de Singapur y se coronó campeón del mundo.
Con una soberbia actuación y en una jornada inolvidable desde el trampolín de tres metros, el medallista de bronce en los Juegos Olímpicos de París 2024 se plantó con confianza y, con un total de 529.55 unidades, subió a lo más alto del podio.
El resultado de Olvera, quien sueña con superar a Joaquín Capilla como el máximo ganador de preseas en una justa olímpica, además de poner fin a la racha de 10 títulos mundiales consecutivos para clavadistas chinos, le permitió ganar su octava medalla en campeonatos del mundo.
La hazaña del mexicano, quien logró en la agónica final un clavado de más de 100 puntos, dejó en el camino a Zongyuan Wang, cuatro veces medallista olímpico y nueve veces campeón mundial, además de Yuan Cao, seis veces medallista olímpico, quienes, ante el dominio del joven de 21 años, completaron el podio.
Osmar Olvera cerró así de gran manera su participación en Singapur 2025, certamen en el que regresará con cuatro medallas: tres platas y una más de oro, triunfos que inspiran a nuevas generaciones.
GRAN TRAYECTORIA
Nacido el 5 de junio de 2004, en Ciudad de México Osmar Olvera Ibarra comenzó su carrera como atleta a los 13 años. A día, a sus 21, ya tiene un palmarés envidiable.
Su debut fue en la Serie Mundial de Clavados 2017 en Kazán, Rusia. Donde logró un quinto lugar en sincronizados de 10 metros.
En 2018 quedó en cuarto lugar en el Campeonato Mundial Junior de clavados en Kiev, y al año siguiente, participó en el Mundial de Natación de Gwangju, Corea del Sur, y logró el sexto puesto en mixtos desde la plataforma de los tres metros.
Aquel 2019, fue un parteaguas para el clavadista mexicano. Arrasó en la Olimpiada Nacional de México, con seis medallas de oro, y ya prometía ser uno de los mejores de su generación en esta disciplina.
Con apenas 17 años, fue el clavadista más joven de la delegación mexicana en los Juegos Olímpicos de Tokio 2021. Participó en el trampolín de 3 metros individual y logró llegar hasta la semifinal, finalizando en la 14ª posición, pero demostrando que su potencial apenas comenzaba a desarrollarse.
'NO SOLO ES EL FUTBOL'
Tras su conquista, el clavadista mexicano lanzó un llamado para que las miradas sean puestas en su disciplina y no sólo en el futbol.
"México no es solamente futbol, en clavados somos los mejores del mundo, lo demostré y lo seguiré demostrando… ¡apoyen!", sentenció con evidente felicidad del clavadista mexicano.
"Estoy muy contento, es un sueño hecho realidad. Gracias México, gracias a toda esa gente que se desveló, a toda la gente que me apoyó. Soy campeón del mundo, somos campeones del mundo", expresó el originario de la Ciudad de México al reafirmar que su próxima meta está puesta en los Juegos Olímpicos de 2028. "Los sueños sí se cumplen, siempre que trabajemos duro; estoy disfrutando, pero con la mente siempre en Los Ángeles en lograr esa medalla de oro".
Después de su actuación en el trampolín, también agradeció a su familia, sus entrenadores y al titular de la CONADE, el exclavadista Rommel Pacheco.
