
¿Conoces la aterradora historia real que inspiró las películas de Chucky?
En Child's Play (1988), Chucky llega como un regalo para Andy, un niño solitario que buscaba compañía. Sin embargo, el muñeco resulta ser el alma de un asesino atrapada en un juguete mediante un ritual satánico, con un único objetivo: regresar a la vida en un cuerpo humano.
Chucky aterroriza a Andy psicológicamente y elimina a quienes interfieren, usando cualquier objeto como arma. Aunque sus intentos fallan y Andy logra escapar, el muñeco asesino se convierte en un ícono del cine de terror, protagonizando múltiples secuelas.
A lo largo de los años, la historia de Chucky evolucionó con nuevos personajes, como su novia y su hijo, mientras seguía aterrorizando al público. Para los niños de los 80, Chucky representaba una pesadilla única, aunque hoy sus travesuras no resulten tan aterradoras. Aun así, sigue siendo una figura inolvidable en la cultura pop.
La historia real de un muñeco 'poseído'
La historia de Chucky, aunque ficticia, tiene un origen en una leyenda urbana. Inspirada por el caso del muñeco Robert, perteneciente al pintor Robert Eugene Otto, esta conexión agrega un trasfondo escalofriante al famoso muñeco de terror.
Robert, entregado como regalo en 1903 por una mujer que trabajaba para la familia Otto y supuestamente practicaba vudú, vestía un traje de marinero y tenía un león de juguete. Eugene lo trataba como un compañero real, pero pronto la familia experimentó sucesos extraños: muebles moviéndose, juguetes destrozados y risas perturbadoras atribuidas al muñeco. Vecinos incluso afirmaron haberlo visto caminar o parpadear.
Tras la muerte de sus padres, Eugene heredó su casa y se reencontró con Robert, quien más tarde fue donado al Museo Fort East Martello en 1994. Hoy, Robert sigue siendo una atracción, con rumores de que maldice a quienes no le muestran respeto, convirtiéndose en una figura clave del folklore paranormal.