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Toy Selectah

Toy Selectah y la cumbia: un viaje sonoro entre montañas y barrios

Desde Monterrey hasta Latinoamérica, la cumbia se convierte en el ritmo mestizo que une tradiciones, innovación y culturas urbanas, con Toy Selectah como uno de sus máximos impulsores

Trasciende. Toy Selectah resalta por haber sido el productor de la banda mexicana de rap Control Machete.

Trasciende. Toy Selectah resalta por haber sido el productor de la banda mexicana de rap Control Machete.

SAÚL RODRÍGUEZ

Escuchó el güiro y el tambor desde muy temprana edad. Eran los años ochenta y la música tropical de Rigo Tovar fungía como un himno entre las montañas de Monterrey. Antonio Hernández, mejor conocido como Toy Selectah, percibía con interés esas melodías que emanaban de la radio y de algún que otro baile popular. Entronada en los relieves del Cerro de la Silla, en el Cerro de la Campana y la Loma Larga, la cumbia reclamó suyo un territorio.

"Había un compañero del futbol, cuyos padres tenían una fábrica de Zapatos en la colonia Independencia. Y entonces, en algunas ocasiones, nos tocaba ir con él, o juntarnos en alguna celebración. Y ver, escuchar esa banda sonora que había en los sábados o domingos posteriores al futbol, la música tropical".

Toy Selectah resalta por haber sido el productor de la banda mexicana de rap Control Machete (que algunos críticos han situado como parte de la Avanzada Regia), pero también revolucionó con la producción del álbum Barrio bravo (2001), del mítico acordeonista Celso Piña. Propietario del sello discográfico Sones del Mexside, fundó el proyecto Compass, con Camilo Lara del Instituto Mexicano del Sonido. Ha colaborado con artistas como M.I.A., Cypress Hill, Thievery, Café Tacvba, Manu Chao, Gustavo Cerati y los gomezpalatinos Caballeros del Plan G. Además del hip hop y la música electrónica, la cumbia es una sonoridad que lo aborda desde siempre.

"Hay muchas historias que han marcado muchas partes. La historia de cómo la música colombiana llega a México, tanto a la capital como al norte, está cada vez más documentada. Las partes principales, toda esta corriente de personajes como El Morelos o Víctor Nani, que empezaron a traer estos catálogos, estos discos que después fueron escogiendo y generándose estos tratos de licenciamiento, distribución, de determinados materiales originalmente colombianos. Cómo Discos Fuentes llega a México a través de su alianza con Peerles".

Su mente es una amplia biblioteca de información sonora. Toy Selectah visitó Torreón durante la pasada Feria Internacional del Libro Coahuila (FILC). Lo hizo en compañía de Serko Fu, un artista lagunero integrante de Caballeros del Plan G. Llegó desde Monterrey por carretera. Así vio la inmensidad de la Laguna de Mayrán, hoy convertida desierto agrietado, para luego hacerla de sonidero en el Centro de Convenciones Torreón y reproducir toda una sesión dedicada a la cumbia y la música tropical.

"No está de más recordar que Medellín (Colombia), en algún momento de la historia, entre 1950 y 1965, tal vez hasta 1970… Medellín, como epicentro de la grabación de la música tropical, fue muy importante. Digamos, si bien en los treinta, cuarenta y hasta 1959, Cuba marcaba la pauta de lo que sucedía con la música de baile, tanto hacia Nueva York como a México, posterior a Cuba fue Medellín. Y antes de la consolidación de la salsa en los setenta, Medellín marcó la pauta y el compás de lo que se bailaba en toda Latinoamérica.

La cumbia es el género musical más democrático del orbe, el regiomontano no tiene duda de ello. Lo es desde su concepción rítmica, un compás simple de dos tiempos, que probablemente habite en los más profundo del ADN latinoamericano y su realidad mestiza. En su sencillez radica su universalidad, porque en América Latina se navega entre lamentarse y entretenerse, y ella permite a ambas cosas.

"La simpleza y universalidad del compás de la cumbia, de su ritmo, creo es lo que hizo que se permitiera trasladar y traslapar a lo largo de Latinoamérica. Y definitivamente, esa particularidad de simpleza hace que prácticamente pueda mimetizarse con cualquier entorno social que requiera entretenimiento. Si vamos al origen, la cumbia es la combinación de lamento, baile y entretenimiento".

SONIDO DE BARRIO BRAVO

Cuando Barrio bravo salió al mercado en 2001, ni Toy Selectah ni el mismo Celso Piña se imaginaron la trascendencia que tendría a nivel mundial. La combinación entre la música del llamado Rebelde del Acordeón con sonidos electrónicos, sumada a colaboraciones con íconos del rock nacional como Rubén Barragán de Cafe Tacvba o Blanquito Man, permitió que el disco sonara hasta en estaciones de radio y canales de televisión donde no se solía reproducir música tropical, sobre todo con el primer sencillo: Cumbia sobre el río.

"Eso fue parte de entender el momento. Era el cambio de milenio, el cambio de siglo. El mundo empezaba a ser más pequeño, más interconectado. Y Cumbia sobre el río, simplemente, lo que proponía era que, los distintos personajes que participamos, habíamos estado viviendo los últimos 20 años esta fusión de cultura urbana con cultura caribeña, con soundsystem, con reggae y con esta cumbia, con este entretenimiento lamentoso y mestizo. Y lo que pasó es que nos tocó ser quienes dijimos: 'Hay que ver la cumbia con este filtro'. Y a lo mejor, el filtro era lo que éramos nosotros y lo que era el pop o la MTV en ese momento; cómo esta ecuación de barrio con mundo era la forma en que debíamos presentarlo".

SOBRE LA LAGUNA Y NUEVAS CUMBIAS

Como todo buen consumidor de cumbia, Toy Selectah está al tanto de lo que sucede en La Laguna. Le sorprende que una agrupación como Tropicalísimo Apache cuente con un gran número de seguidores en ciudades tan lejanas como Hermosillo, Sonora. Admira esa situación, pero desconoce la historia a detalle, pero supone que podría deberse a una cercanía o capacidad de vinculación.

"Definitivamente, como baluarte, está el Apache. Pero, ¿qué me llama la atención de la cumbia lagunera? Pues el tempo, va más rapidito, lo contrario a lo rebajado. Y eso es muy contagiante. Te contagias del ritmito, creo que esa es la característica principal".

Asimismo, el productor no cesa en su afán de consumir nuevas estéticas. Confiesa seguir proyectos como El Cañón del Sonidero (Chiapas) o Radio Malilla (Ciudad Juárez). Celebra eventos como el Boiler Room de sonideros que aconteció el año pasado en Ciudad de México, que artistas urbanos como Santa Fe Klan sepan tocar el acordeón, las mezclas con el reguetón y que géneros como el rock sigan acudiendo a la cumbia.

"Hay mucho talento, me atrevería a decir que la música está más viva que nunca".

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Escrito en: Toy Selectah

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