
Abarrotan parroquia de San Judas ante llegada de las reliquias del patrono de las “causas difíciles”
Cientos de fieles abarrotaron el templo de San Judas Tadeo en Torreón, con la esperanza de por lo menos rozar la vitrina donde se expone las reliquias de primer grado que corresponden a un fragmento de hueso de su brazo izquierdo del patrono de las “causas difíciles y desesperadas” que fue empotrado en una réplica.
Las reliquias provenientes del municipio de Matamoros, en donde permanecieron durante un día, fueron recibidas frente al acceso a la colonia Providencia, a unos tres kilómetros de la parroquia, por parte de un numeroso grupo de fieles encenizados por el párroco Samuel Lozano.
Escoltados por elementos de Tránsito y Vialidad de Torreón así como de la Policía Estatal, el contingente avanzó en procesión acompañados por una danza.
Mientras que en el templo, aguardaban cientos de fieles en espera del arribo de las reliquias.
A su llegada, las reliquias que viajan acompañas por una réplica de San Judas Tadeo, fueron recibidas en medio de aplausos y expresiones como la de “Viva Cristo Rey, Viva San Judas Tadeo”, mientras el personal que lo traslada por todo el país, pedía no tocar ni la imagen y mucho menos la vitrina donde viajan las reliquias.
Al entrar al templo, algunos fieles se arrodillaron, otros más estallaron en llanto y otros no paraban de aplaudir.
En todo momento, las reliquias estuvieron resguardadas por el personal voluntario, ya que más de uno intentaba tocar con su rosario o simplemente con una estampa, la vitrina como agradecimiento a los favores concedidos por su intercesión o para solicitar su ayuda en una situación difícil o desesperada.
Al término de la celebración eucarística, se permitió a los presentes pasar frente a las reliquias de forma ordenada, hecho que algunos no respetaron, pues saltaron la valla humana para tocar el cristal de la vitrina.
Tal fue la asistencia de en este primer día, que la fila para ingresar al templo daba la vuelta por todo el atrio del templo.
Pero para hacer más llevadera la espera, se montaron puestos de comidas, bebidas y de otros artículos por parte de los voluntarios de la parroquia.