El lagunero y seleccionado nacional, Jorge Sánchez, fue expulsado en la primera mitad, dejando a su escuadra con 10 elementos.
Sin lugar a dudas, en el duelo de estrategias, Juan Carlos Osorio le ganó la partida a Martín Anselmi. El marcador (3-0), la goleada, lo hacen más que evidente.
Cruz Azul lo ha vuelto a hacer, ha vuelto a fallar a la hora buena, y ahora se necesitará una gesta epopéyica para -en el juego de vuelta- remontar y seguir con vida.
Y no es que el colombiano haya inventado el hilo negro. Jugó a la lógica. Cuidó bien sus espaldas y atacó por donde más le duele a los Cementeros: La pelota cruzada a lo largo y a la velocidad. José "la Pantera" Zúñiga abrió el marcador de esa forma (10').
Y vino el error de siempre, el de Gonzalo Piovi, quien dejó el balón a merced de Efraín Álvarez, que con mucha clase superó a Kevin Mier (19').
Además, Cruz Azul no se ayudó. Jorge Sánchez perdió la cabeza, pisó a Zúñiga y se fue expulsado (34'). La consecuencia fue el tercer tanto, obra de Emanuel Reynoso (42').
El resto del juego fue un acto de sobrevivencia por parte de los muy lastimados Cementeros. Mientras que los Xolos no se fueron con todo en busca del cuarto.
Así, el gran torneo, el récord de puntos azul, no vale, porque están al borde de otro ridículo.