
Seguridad privada. (ARCHIVO)
Hay cerca de 6 mil elementos de seguridad privada en Coahuila, arriba de 900 mil personas a nivel nacional. Se considera que es actualmente la tercera fuerza empleadora en el país, con más elementos que el Ejército, la Guardia Nacional o cualquier otra corporación de seguridad pública.
Isaac del Bosque Mercado, presidente de la Asociación Mexicana de Empresas de Seguridad Privada (AMESP) capítulo Coahuila, explicó que no se trata solamente de los guardias que están en el exterior de los antros sino que es toda una industria en temas de blindaje, ciberseguridad, monitoreo de inteligencia, venta de equipo, de armamento, de aeronaves, etc.
Señaló que son alrededor de 340 las empresas de seguridad privada en el estado que cuentan con su registro permanente o que están en trámite de revalidación, o en el proceso para nuevo ingreso, mientras que en operación al 100 por ciento son cerca de 260, que ya cuentan con todos sus papeles en regla.
Mencionó que la regularización de estas empresas y capacitación de sus elementos ha sido menester de la asociación y de otras secretarías como la de Desarrollo Económico, de Economía, de la Función Pública, así como de la Secretaría de Seguridad Pública tanto federal como estatal, ya que la informalidad es un tema grave porque realmente significa ilegalidad.
"Son empresas que están operando ilegalmente, contratadas por otras empresas que llegan a ser partícipes de la comisión de este delito", explicó, además de que generan una competencia desleal.
"Sigue habiendo bastantes empresas ilegales en el sector", expuso del Bosque Mercado. Reconoció que la Dirección de Regulación de Empresas de Seguridad Privada del estado está preocupada y ocupada por focalizar, sancionar y cerrar a las empresas que están operando ilegalmente, aunque también resulta complicado encontrarlas por la poca participación de quienes están dispuestos a evidenciarlas, incluido quien les contrata.
Desde la asociación se ha contactado a diversos de estos negocios para que se puedan regularizar, pues han encontrado que en algunos casos son temas de gestión, en los que les faltaba información y se les ha asesorado de forma gratuita para que pongan sus documentos en orden.
El presidente de AMESP dijo que muchos restaurantes y bares contratan al clásico "cadenero", una figura que no es seguridad pero es parte del bar, no está registrado, no tiene capacitación, no está regulado, que puede actuar bien o mal, incluso a favor de los agresores o puede no hacer nada. En este sentido, reiteró la necesidad de regular a los elementos y brindarles la capacitación, pues en diversas ocasiones terminan por ser el primer respondiente ante alguna situación.