La Casa de Jesús trabaja con niñas que enfrentan violencia o están en situación de abandono.
Representantes de la Casa Hogar para niñas Elena Domene de González, ubicada en Torreón, realizaron un desayuno con la intención de convocar a que más personas, a través de donativos, se sumen a su causa de impulsar el desarrollo de niñas de 3 a 12 años de edad que viven en contextos complicados.
Desde 1992, la también conocida Casa de Jesús, ha trabajado con niñas que enfrentan problemas de violencia, ya sea física, psicológica, o se encuentran en situación de abandono.
Bajo el lema "Mujeres impulsando el cambio", la representante legal de esta Casa Hogar, Inés del Carmen Mijares, mencionó que la convocatoria es principalmente para hacer un recordatorio a la sociedad lagunera de la labor que realizan para proporcionarles a las niñas una vida digna, una a la que tiene derecho, pero que desgraciadamente un alto número de ellas, no puede acceder, debido a diversos problemas sociales que acaban golpeando su desarrollo integral.
Por ello, el llamado a las asistentes, de la voz de Inés del Carmen, fue: "sabemos que cada una de ustedes tiene un corazón generoso y un espirito solidario y por eso sabemos que podemos contar con su ayuda".
Aproximadamente atienden en promedio entre 40 y 50 niñas en cada generación, que por lo general vienen de familias con problemas económicos o de violencia.
"Recordemos que las mujeres son vulnerables cuando en su familia sufren violencia, desintegración y problemas económicos y que todos podemos ser solidarios y podemos apoyar, para que las niñas puedan desarrollarse par un mejor mañana".
¿QUÉ APOYOS BRINDA LA CASA HOGAR?
La hermana Ileana Sierra Moreno, directora del lugar, otorgó el dato puntual de que actualmente son 45 niñas las que viven en la casa hogar. La mayoría, dice, llegaron por desintegración familiar y quedaron a cargo de las abuelas.
Las niñas viven en la casa de lunes a viernes. "Los fines de semana las recogen para que puedan convivir con su familia y regresan con nosotros hasta el domingo a las 4 de la tarde".
La hermana Imelda compartió que actualmente observan que las niñas son más abandonadas por sus madres. Son llevadas ahí por el padre o por la abuelita, por no tener dónde dejarlas, y no poder hacerse cargo de ellas durante la semana.
Lo importante, mencionó la hermana, es que las niñas no se queden solas, porque en contextos sociales conflictivos son presas fáciles, y lo mejor es encontrarles un lugar seguro, como la Casa Hogar para niñas Elena Domene de González, donde tienen un espacio para estudiar y para realizar actividades de todo tipo, como por ejemplo, deportivas o artísticas.
"Van a la escuela, regresan y comen, luego ayudan limpiar un poco. Después tienen actividades muy diversas, como danza contemporánea, zumba, deportes, algo de pintura. Las actividades van cambiando dependiendo de los voluntarios". Actualmente en la Casa hogar para niñas conviven 40 voluntarios en diversas áreas entre administrativas y operativas.
Las necesidades, según la directora, son muchas, desde las básicas, hasta cuestiones más enfocadas al funcionamiento del lugar, como, por ejemplo en cuestiones de electricidad o que no funcione la estufa.
Como mensaje final Ileana Sierra expresó que: "el llamado es a que las mujeres apoyemos a las mujeres, estás niñas mañana van a crecer y serán parte de nuestra sociedad".
