
BYD. (ARCHIVO)
Mientras México intenta evitar los aranceles amenazados por Donald Trump y el juego a dos caras de Canadá, la presidenta Claudia Sheinbaum planteó que no había nada firme sobre una inversión de una automotriz china.
Desde el triunfo de Donald Trump y meses antes con Joe Biden las inversiones chinas, en especial de vehículos eléctricos han sido mal vistas por la superpotencia en su esfera.
Esto se registra mientras la automotriz china de vehículos eléctricos BYD venció por ganancias a Tesla por primera vez este 2024, al registrar entre julio y septiembre una entrada de 28.2 billones de dólares, a comparación del fabricante estadounidense que fue de 25.2 billones.
A su vez, la Unión Europea, Canadá y Estados Unidos han venido imponiendo aranceles cada vez más altos, para impedir el avances de marcas como BYD en sus mercados, con los que sus fabricantes no pueden competir.
Entonces, ¿Qué sucede con la versión de la llegada de una automotriz china a México?
El exsubsecretario Simón Levy, explicó que este año se estaría dando el anuncio de la inversión de la misma BYD, luego de que la compañía obtuviera permiso del Ministerio de Comercio de China para la inversión.
El anuncio de la inversión fue reforzado por las declaraciones del presidente de operaciones de la compañía en México, Ray Zou, sobre que el “plan se mantiene intacto”.
Comentarios retomados por el medio Global Energy señalan que Ray Zou reiteró el interés de la empresa en el mercado mexicano y destacó que la planta producirá para el mercado interno, excluyendo exportaciones a Estados Unidos.
La planta producirá 300 mil vehículos y se espera genere más de 10 mil empleos.
El anuncio final de su ubicación se dará a finales del presente año, de momento quedan como opción tres estados.
El fabricante chino proyecta vender 50 mil vehículos eléctricos en México.