Motociclistas. (ARCHIVO)
En Torreón se ha elevado exponencialmente el número de motocicletas en circulación, con un crecimiento del 2 mil 052 por ciento en los últimos seis años; tan sólo de 2022 a 2023 había otros 3 mil 371 de estos vehículos en las calles, al pasar de 13 mil 290 a 16 mil 661; es decir, un 25 por ciento más.
De acuerdo con la estadística anual de Vehículos de Motor Registrados en Circulación (VMRC) 2023 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), este incremento supera por mucho al que se presentó a nivel nacional, que fue del 14.03 por ciento en los dos últimos años y un acumulado del 116.32 por ciento en los seis años de referencia (2017 a 2023).
Fue precisamente a partir de 2017 cuando los registros en esta ciudad se dispararon, pues la estadística anual pasó de 774 a 5 mil 821 motocicletas, lo que representa un incremento del 652 por ciento.
Desde entonces, el uso de estos vehículos motorizados ha ido progresivamente al alza, tomando en cuenta que en 2019 la cifra creció a 6 mil 929 unidades; ocho mil 479 en 2020 y en 2021 llegó a 11 mil 438, mientras que en 2022 pasó a 13 mil 290.
El parque vehicular motorizado de Torreón está integrado por 257 mil 524 unidades, de las cuales el 70 por ciento son automóviles, 21 por ciento camiones de carga y dos por ciento camiones de pasajeros, mientras que las motocicletas representan el siete por ciento.
Sin embargo, ante el crecimiento exponencial de estas últimas, se han vuelto el foco de atención para la puesta en marcha de programas y acciones por parte de las autoridades, que vayan encaminadas a la protección de quienes las utilizan.
“Incluso pagando el diez por ciento del valor te dan la llave, aunque no cuentes con seguro ni la capacidad para conducirlas”, dijo el director de Vialidad y Movilidad Urbana, Luis Morales Cortés, quien reconoció la urgencia de aplicar estrategias que regulen la compra, venta y uso de motocicletas.
De acuerdo con las revisiones que se han practicado, de 30 motociclistas solamente uno o dos cuentan con seguro, lo que refleja una ausente cultura de previsión pese a que el costo es relativamente bajo, de apenas 3 mil pesos anuales.
Este es uno de los aspectos que se busca regular, de manera que la compra de dichas unidades se condicione a la contratación del seguro; es algo que se ha logrado con una agrupación de repartidores, quienes a raíz del fallecimiento de un compañero se organizaron y consiguieron el apoyo de una aseguradora, que los exime del pago de comisión por apertura y los protege por ser figura de alto riesgo, por el número de horas que transcurren a bordo de un vehículo motorizado.
Morales Cortés indicó que otra área de oportunidad sigue siendo el uso de casco de protección, “la gente sigue saliendo de casa sin casco de seguridad y se han registrado fallecimientos por ese motivo”.
A partir del programa Sin casco no viajas, que incluye el curso de capacitación y certificación en manejo preventivo y defensivo, se ha logrado disminuir la cifra de muertes de motociclistas en hechos viales, pues mientras este año han ocurrido ocho casos, al mismo periodo de 2023 se tenían 18, es decir un 55 por ciento menos.
“Se imparte este curso que ante todo, busca salvar vidas; si no se tuviera, no sé de qué número estaríamos hablando. El año pasado, en Saltillo a esta fecha llevaban 75 motociclistas fallecidos y nosotros cerramos con 20 casos el 2023”, indicó.
El uso de las motocicletas por menores de edad, es otro tema de preocupación, ya que tan solo de abril a agosto pasados se detectó a más de cien jovencitos conduciendo o como acompañantes, pese a que es una prohibición.
A las motociclistas se suma otra preocupación, la de bicicletas y patines eléctricos que cada vez son más utilizadas y sobre las que tampoco hay reglamentación.
Ante ello, las comisiones de regidores están trabajando para establecer disposiciones sobre límites de velocidad, uso obligatorio de casco de seguridad y restricciones para transitar en vías principales, de manera que sólo puedan hacerlo a través de las ciclovías.